La magistrada que acabó bloqueándose entre montañas de papeles

lugo / LA VOZ

LUGO CIUDAD

OSCAR CELA

07 nov 2019 . Actualizado a las 14:04 h.

Hace aproximadamente doce años que la jueza Pilar de Lara Cifuentes (Cartagena, 1968) se hizo cargo del Juzgado de Instrucción número 1 de Lugo. Hasta su llegada, en la ciudad de las murallas jamás hubo tantas y tan sonadas operaciones judiciales. Quizás ninguna de las casi mil personas que salieron a la calle en manifestación para defenderla a ella y otra compañera, en el otoño del 2011, creyese que a día de hoy tendría una sanción, que le puede acarrear graves consecuencias, por los retrasos en las investigaciones. Era difícil de imaginar que tardaría diez años en acabar la operación Carioca, promovida para desarticular la corrupción en los burdeles y la explotación sexual de mujeres, y que el proxeneta al que persiguió con tanto ahínco esté en la cárcel no por esa causa, sino por un presunto maltrato a la que fuera su esposa.

De Lara se atascó en los cientos de folios que generó y las horas y horas de declaraciones de sus operaciones, que llegó a realizar a altas horas de la madrugada y en días festivos. Algún abogado dice que la operación Carioca es más voluminosa que la del 11M: 272 tomos y 130.000 folios, frente a 241 y 43.000. Hay letrados, conocedores de su mecánica, que aseguran que las declaraciones con ella son eternas y que acaba imputando (ahora investigando) a cualquiera en un abrir y cerrar de ojos.

En sus doce años en Lugo le «cayeron» acusaciones y críticas de todo tipo. Muchas de ellas estuvieron relacionadas con su vida personal. La llegaron a situar en el PP cuando su esposo ocupó un cargo en la ejecutiva local. Incluso hubo quienes la criticaron por tener un cuadro del papa Juan Pablo II en el despacho. La foto, según algunos medios, se la regalaron sus compañeros de Mieres cuando dejó uno de los juzgados de instrucción para venirse a Lugo.

Mantuvo un sonado enfrentamiento con el abogado Cándido Conde (hijo del que fuera fiscal general del Estado) cuando defendía al socialista Gómez Besteiro. En ese momento denunció que había un plan contra ella.