Las medidas de Terra Chá para combatir la sequía: ni baldear calles, ni regar jardines, ni llenar piscinas

Xosé María Palacios Muruais
Xose María Palacios VILALBA / LA VOZ

VILALBA

El cauce del río Azúmara en Castro de Rei muestra los efectos de la sequía
El cauce del río Azúmara en Castro de Rei muestra los efectos de la sequía AINHOA GARCIA

Responsables municipales esperan que esas actuaciones eviten cortes del suministro

10 ago 2022 . Actualizado a las 16:26 h.

La sequía se nota en la Terra Chá, lo que obliga a los concellos a tomar medidas para rebajar el consumo de agua en una época del año en que suele subir. El aumento se nota sobre todo por las mayores necesidades de las explotaciones ganaderas, aunque también por la presencia de turistas y de emigrantes y por el uso de la traídas municipales para usos como el riego de huertas y de jardines.

Hay alcaldes que piden públicamente a los vecinos que gasten menos agua. El de Castro de Rei, Francisco Balado, explica que en captaciones como la de Ramil —que abastece a esa parroquia y a Azúmara, Balmonte y Goberno— ya se empieza a notar el descenso del nivel. Las mayores necesidades de las explotaciones de ganado, en donde las vacas necesitan beber más agua, son una de las principales razones del aumento del consumo. Entre la captación de Ramil, la de Quintela y la de Prevesos, que abastecen a las parroquias que reciben abastecimiento público, se aportan los siete millones de litros consumidos algunos días. En invierno, detalla el regidor, no se rebasan los cuatro millones.

Balado espera que prescindir del baldeo de calles, del llenado de piscinas doméstica o del riego de jardines o de huertas con agua de la red pública sea suficiente. Si con eso no alcanzase, habría que tomar medidas más drásticas, entre las que estarían los cortes de suministro. Una de las principales obras de este mandato en el municipio está relacionada con la red de agua, y consiste en la renovación de un tramo de red de varios kilómetros. Los trabajos, financiados por la Xunta y por el Concello, buscan una mejora en varias zonas, especialmente en Castro de Ribeiras de Lea y en el parque empresarial de la localidad.

Imagen actual del embalse de San Xoán, en Guitiriz
Imagen actual del embalse de San Xoán, en Guitiriz SUSO PENA

También el alcalde de A Pastoriza, Primitivo Iglesias, subraya que es necesario reducir el consumo de agua y plantea medidas similares, orientadas, dice, a un consumo racional. La alta carga ganadera del municipio y el aumento del consumo en las granjas son la principal razón del incremento, explica Iglesias. El regidor de Outeiro de Rei, José Pardo, reconoce que la llegada de veraneantes y las necesidades de las ganaderías elevan el consumo prácticamente al doble de otros períodos del año.

En municipios como esos tres, además, el aumento del consumo de agua va acompañado de un incremento del gasto de bombeo. En Castro de Rei se realiza en las captaciones de Ramil y de Quintela. En Outeiro de Rei se efectúa para llevar el agua, tomada del río Ladra, a los depósitos de Martul. En A Pastoriza se efectúa en las captaciones de O Carrizal, en donde el agua procede de un manantial, y de Fonmiñá, en donde llega procedente del río Miño.

Bombeo

Hay municipios en donde las necesidades de abastecimiento están mejor cubiertas que otros años. Es el caso de Pol, en donde los trabajos de ampliación de la red pública han permitido superar problemas que en la pasada década eran habituales. Sin embargo, la necesidad de bombear agua de la parroquia de Lea al depósito situado entre las parroquias de Cirio y de Suegos supone un gasto elevado, como admite el alcalde, Lino Rodríguez: entre la captación y los depósitos hay una diferencia de altitud de más de 200 metros (520 en Lea, 740 entre Cirio y Suegos).

En concellos donde no se han observado problemas de suministro sí se pidió ya una reducción del consumo. Así ocurrió en Guitiriz, en donde la alcaldesa, Marisol Morandeira, publicó, hace semanas, un bando en el que solicitaba un consumo racional. Hay municipios donde no solo se registra un aumento del consumo sino que se teme que la situación empeore si no llueve. Es el caso de Friol, en donde el consumo el invierno (unos 500.000 litros) es ahora prácticamente el doble. El alcalde, José Ángel Santos, reconoce que la situación puede complicarse si persiste la sequía, aunque agrega que por ahora no ha habido problemas.

Pozos de barrena

También en Xermade se aprecia un incremento del consumo, derivado de las mayores necesidades de las explotaciones ganaderas. En este municipio, además, se consume más agua en verano porque familias con traídas propias utilizan la conexión a la red general. Debido al aumento del consumo, en la capital del concello, en Roupar y en Momán están funcionando pozos de barrena, de los donde sale agua para los depósitos. El teniente de alcalde José Prieto afirma que la situación se agravará si la falta de lluvias se mantiene en el final del verano y en el principio del otoño.

En municipios como Vilalba y Cospeito la falta de agua en algunas zonas se suple con envíos del Concello. Dentro del municipio vilalbés, explicó el concejal Eduardo Vidal, el problema está presente en distintas parroquias, aunque sin ser aún preocupante. En Cospeito, también se reparten por varias parroquias de la zona rural las viviendas con problemas, dijo el edil Álvaro Puente.