Maternidad subrogada

OPINIÓN

31 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Nuestras autoridades, nuestros políticos y el conjunto de la ciudadanía encontrarán en el documento que acaba de hacer público el Comité de Bioética de España una información abundante, pertinente y variada en sus diversas perspectivas acerca de los aspectos éticos y jurídicos de la maternidad subrogada, asunto popularmente conocido como vientres de alquiler. Son 92 páginas que no tienen desperdicio, imposibles de resumir en 1.400 caracteres. 

Se nota que es un documento que ha sido discutido, razonado y redactado con especial minuciosidad, incluyendo el voto particular del eximio jurista Carlos Romeo Casabona. Sin duda, es el mejor de cuantos documentos lleva publicados el CBE. Todo el mundo puede bajárselo de la web del CBE. Y haríamos bien en leerlo, con sosiego, sin apasionamientos, para tener una opinión formada con seriedad sobre tan peliagudo asunto, sobre todo aquellos que se sienten en la obligación de opinar.

España, junto con la práctica totalidad de países de nuestro entorno cultural y del resto del mundo, ha rechazado de forma continuada esta práctica. La experiencia de los países en los que esta práctica es admitida ha puesto crudamente de manifiesto la explotación a la que son sometidas las mujeres gestantes. El CBE concluye que esa es una razón poderosa para que España defienda a nivel internacional la adopción de medidas dirigidas a prohibir esta práctica, postura que comparto.