Rupturas y fin de crisis

OPINIÓN

03 jul 2017 . Actualizado a las 08:12 h.

El Consejo General del Poder Judicial informa acerca de que el número de divorcios tramitados en Galicia, durante el primer trimestre de 2017, ha aumentado respecto al mismo período del pasado año en casi un 6 %, especialmente los de no mutuo acuerdo. ¿A qué responde este cambio de tendencia? Puede ser un síntoma de que la crisis económica está remitiendo. Los cónyuges mal avenidos, que en situación de estabilidad económica disolverían su matrimonio, en caso de tener que vivir echando cuentas permanentemente se lo piensan más y aguantan lo indecible. Saben que en un divorcio normalmente las dos partes van a ver mermado su poder adquisitivo, y eso les hace esperar a que la época de vacas flacas emprenda su viaje de retorno para iniciar unos trámites judiciales encaminados a terminar con su particular calvario.

¿Y el dato de que se produzcan más contenciosos que consensuados? Esto es debido a que la jurisprudencia está empezando a reconocer la custodia compartida, y los hombres ya no tienen que firmar un cheque en blanco para poder ver a sus hijos un poco más de lo que hace unos años les permitiría un juez.

Deciden litigar por permanecer el mismo tiempo que la madre con sus retoños, y como eso algunas mujeres no están dispuestas a aceptarlo, ya sea por motivos razonables o absurdos, la guerra de los Rose puede darse por declarada. La diferencia es que Michael Douglas y Kathleen Turner, una vez acabado el rodaje, se iban tan contentos para casa. Sus broncas solo eran de película. De gran película.