Israel confinado

Yashmina Shawki
Yashmina Shawki CUARTO CRECIENTE

OPINIÓN

20 sep 2020 . Actualizado a las 13:04 h.

Israel acaba de decretar un segundo confinamiento total por un período inicial de tres semanas. Esta decisión forzada por el altísimo nivel de contagio, más de 5.000 casos diarios para una población de nueve millones, ha sido acogida, como no podía ser de otra manera, con gran disgusto por la población. Al descontento general por esta medida se une la frustración de que coincida con uno de los períodos de festivos religiosos más relevantes en el país hebreo, su Año Nuevo. Así que, al más que cuestionado mandato de Netanyahu le llueven las críticas desde todos los ámbitos sociales y desde todo el espectro político por múltiples razones. 

En primer lugar, se critica que la reactivación de la actividad tras el primer confinamiento fue demasiado precipitada y se hizo sin las necesarias medidas de prevención, lo que ha propiciado que se reanudaran los contagios y estos se propagaran a gran velocidad.

Además se cuestiona la no imposición de medidas selectivas en los barrios con mayor población y, consecuentemente, con el mayor índice de contagios, los que, curiosamente, están habitados por las comunidades ultraortodoxas judías. Estas, aliadas de Netayanhu en el Gobierno, no fueron obligadas a seguir las restricciones impuestas para todos, lo que señala a la permisividad interesada del primer ministro, pero, también y, esto, si cabe, es más grave, a la falta de concienciación de esta parte de la sociedad sobre la necesidad de seguir las medidas de prevención.

La segunda crítica descansa en el hecho de que un segundo confinamiento agravará la recesión económica en la que está inmersa el país y dará la puntilla a los sectores más vulnerables. La tercera crítica, quizás la más sangrante, se refiere a la utilización del confinamiento como método para frenar las crecientes protestas contra la política y, sobre todo, la presunta corrupción de Netanyahu.

Entre tanto, deberíamos redoblar las precauciones para evitar que se cumpla la advertencia del primer ministro israelí de que más países aplicarán un segundo confinamiento. Cuando veas las barbas de tu vecino pelar...