¿Por qué no quieres vacunarte contra el covid?

José Luis Fernández Trisac, pediatra del chuac TRIBUNA

OPINIÓN

STEPHANE MAHE | Reuters

15 may 2021 . Actualizado a las 09:53 h.

Con cierta frecuencia hablo con personas que dicen que no se quieren vacunar frente al SARS-CoV-2. Lógicamente les pido que me argumenten su decisión, y escuchando sus explicaciones creo que debemos vencer esta crisis de confianza en la vacuna con información y no con imposición.

En principio, las vacunas no suelen ser obligatorias, pero estar inmersos en una pandemia quizá nos dé argumentos para cambiar este principio. Ana María Carmona, catedrática de Derecho Constitucional en la Universidad de Sevilla, señaló recientemente que nadie está obligado a recibir un tratamiento médico, pero añadía que cuando hablamos de un tema de salud pública -recogido en la Ley General de Salud Pública- el interés general está por encima del individual.

Pero no estamos aquí argumentando sobre la libertad de vacunarse o no y sus aspectos éticos y legales; estamos hablando sobre qué podemos hacer frente a la negativa a vacunarse, sabiendo que las mejores herramientas para la erradicación de la pandemia son las vacunas.

Hoy sabemos que los países con mejores niveles de inmunización en sus niños y niñas obtienen esas tasas gracias a la educación para la salud de su población y al acceso a la vacunación con horarios accesibles y sin cargas económicas para las familias. Parece evidente, entonces, que la información de la población juega un papel fundamental en el éxito de una campaña de vacunación. Esa información llegará a la gente a través de diversas fuentes como las sociedades y publicaciones científicas, los medios de comunicación y las redes sociales. Estas últimas son hoy en día las vías de difusión más extendidas, incontrolables e inmediatas, en ellas encontraremos una ingente cantidad de informaciones médicas extravagantes y bulos, o casos anecdóticos que son semillas de intranquilidad y desconfianza.

Una de las partes más importantes del método científico es la publicación de los resultados obtenidos, sean favorables o no a las hipótesis planteadas. Se comunican también los efectos adversos graves que toda intervención médica puede tener; todos los comunicadores deben intentar ponderar cómo tiene que llegar la información a la sociedad, porque quizá cuando alguien dice no a la vacuna frente al coronavirus es que no hemos informado bien. Excluimos aquí a los negacionistas ideológicos, estos nunca rectificaran sus planteamientos, pero una comunicación transparente, científica y veraz hará que muchos otros (negacionistas pragmáticos) reconsideren su negativa.

Confío en la madurez y solidaridad de nuestra sociedad, evitemos el sensacionalismo e informemos en su justa medida de los efectos colaterales que toda actuación médica conlleva. De esta manera, con información adecuada puedes tomar tu mejor opción, y decir si quieres, asumiendo que el riesgo cero no existe, protegerte tú y a todo tu entorno o mantenerte en el negacionismo ideológico. Si has apostado por la vacuna, vacúnate con la que te toque.