Los conductores ebrios no mienten, pero sí delinquen

OPINIÓN

JMGARCIA | EFE

09 ago 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Alcohol al volante

Cada año, la DGT nos intenta concienciar sobre la gravedad de los accidentes de tráfico y los variados motivos que los provocan. Parece mentira, pero a estas alturas aún debe haber gente que necesita que le recuerden que las imprudencias tienen consecuencias.

Recientemente, un usuario que conducía un patinete eléctrico ha sido sancionado con una multa de 1.000 euros por conducir bajo los efectos de sustancias estupefacientes. Y yo me pregunto, ¿por qué no pensó en coger un taxi? Le hubiera salido más económico y no hubiera puesto en peligro su vida ni la de los demás. Igual Stevie Wonder debería volver a rodar aquel mítico anuncio con el eslogan renovado: «Si bebes y consumes drogas, no conduzcas».

Parece mentira que tres de cada cuatro fallecidos en accidente en el 2021 hubiesen bebido. No sé a ustedes, pero a mí me parece preocupante. Quizás los conductores ebrios no mienten, pero delinquen. Eric García Miras.

Ourense versus Bronx

El recuerdo de Ourense sin grafitis obscenos parece impensable a los nacidos en esta ciudad. Estos «talentosos encapuchados», que ven en cualquier lugar público un lienzo donde plasmar sus dibujos, actúan con una impunidad legal que parece sorprendente. ¡Dios quiera no se extienda a los vehículos aparcados en la vía pública!

No recuerdo pasear por ninguna calle donde tan siquiera se intentase limpiar la fachada de estos murales por parte de ninguna autoridad. Ni tampoco ver a ningún oficial poner algún tipo de sanción a quienes con su falta de pudor, vergüenza y educación se dedican a destrozar el encanto de calles, vagones e iglesias ajenas.

Gracias a Dios nos queda el consuelo de saber que en el casco histórico ya no existe ni un hueco más donde pintar. Esperemos que la nueva moda venidera sea denunciar por activa y pasiva a quienes pintarrajean tu casa, tu tren o tu país. Óscar Castillo Fernández. Ourense.

 Publicidad engañosa

En un mundo donde una imagen vale más que mil palabras, cuidar nuestro aspecto es objeto de muchos negocios. Las famosas «dietas milagro» y los anuncios con imágenes bastante ilustrativas que invitan al consumo del «producto milagroso» aprovechan el lado débil y sensible de la persona que desea mejorar su físico de forma rápida. El spot publicitario seduce desde el primer momento debido a la necesidad de conseguir esa figura «perfecta» lo más rápido posible.

Deberían estar controlados estos productos, al inducir a lograr un aspecto que solo un cambio en el estilo de vida puede lograr en el tiempo. Cada vez más los distintos estudios, así como los análisis de los expertos en estas materias, nos recomiendan los cuatros aspectos que de verdad funcionan: ejercicio físico —a ser posible diario—, buena alimentación (verduras, frutas, legumbres), estrés moderado y un buen dormir. Este último llama la atención, sobre todo para aquellas personas cuyo aspecto físico les quita el sueño. Dormir mal no es que engorde, sino que no ayuda al objetivo de tener una buena figura física.

Los anuncios trampa relacionados con el cuerpo humano deberían ser sustituidos por los del fomento del cambio en el estilo de vida. Si la DGT todos los años realiza campañas para evitar las muertes y los atropellos, ¿por qué Sanidad no hace lo mismo para fomentar un estilo de vida saludable?

Con ello, también se evitarían muertes, así como patologías que el Servicio Nacional de Salud no va a poder asumir, debido al número elevado de personas con obesidad y sobrepeso (54 %), en particular la población infantil (40 %). Pedro Marín Usón.