Ánimo y aliento frente a los problemas de salud

P. S.

OURENSE

20 oct 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

La noticia de que Manolo era el premiado en el sorteo de la Lotería Nacional celebrado el sábado, y que uno de los billetes adquiridos la semana pasada le reportará tres millones de euros, fue saludada con gran satisfacción por todos aquellos que lo conocen y saben de unos problemas de salud, que, casualidades de la vida, comparte con su cuñado. Ayer mismo se sometieron al mismo tratamiento. Por la tarde. Pasan sus buenas horas amarrados a una máquina y vuelven a casa machacados y cansados. Ida y vuelta en ambulancia, para meterse en cama y descansar tan pronto están de regreso.

Los dos cuñados, además, cuidan a la hermana del premiado y esposa del segundo, cuya fragilidad de salud es también conocida de todos los vecinos de esta familia, que mezclan las palabras de ánimo y aliento con las de satisfacción, en el sentido de que la suerte ha sido justa. Por una maldita vez.

Celebración comedida

Será, dicen quienes los conocen, difícil que en este caso vayan a malgastar el dinero en inversiones absurdas, en juergas o en excesos de todo tipo, como en tantas ocasiones ocurre. La delicada salud que comparten tanto el premiado como su familia más próxima, algo que es conocido en el pueblo donde residen, lleva a quienes los tratan a emocionarse y a desear que ojalá en dinero pueda permitirles hacer más llevadera la situación. O incluso abrir posibilidades.

Trini, que es prima del agraciado y vecina de la misma localidad, se emociona cuando habla y confirma que ha habido premio. Confiesa que se enteró por la mañana. Como el propio premiado. Se lo contó Manolo tan pronto como regresó al pueblo, antes de volver a salir.