Los ojos que detectan el gas radón

Rubén Nóvoa Pérez
rubén nóvoa OURENSE / LA VOZ

OURENSE

SANDRA ALONSO

Su presencia en la provincia de Ourense es más elevada que la media nacional

18 nov 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La decisión del Concello de encargar unas mediciones para determinar la presencia de gas radón en las dependencias municipales hace que muchos trabajadores de la institución se pregunten si realmente corren riesgos para su salud o cuáles serían las soluciones a adoptar para acabar con esta amenaza. A estas y otras preguntas responde Dolores Cortina, responsable del Laboratorio de Análisis de Radiaciones, que pertenece al GENP (Grupo Experimental de Núcleos y Partículas) dentro del Departamento de Física de las Partículas de la Facultad de Física de la USC.

¿Qué es el gas radón y cómo se detecta?

El radón es un gas radiactivo que emana del suelo. Viene de la transformación del uranio y está presente en todos los suelos que tenemos. Una de sus características es que puede salir de la tierra y pasar al aire. La responsable del Laboratorio de Análisis de Radiaciones explica cómo trabajan para su detección: «Lo que tenemos que hacer es medir la concentración de radón en aire para cuantificar su presencia».

¿Cuándo comienza a ser perjudicial para la salud?

«El uranio está en todas partes, lo que pasa es que hay ciertos sitios donde la concentración puede ser más elevada. En Galicia, por ejemplo, estamos ante un terreno que es muy antiguo y fracturado y al gas le resulta relativamente fácil salir a la superficie», explica Dolores Cortina. Si sale al exterior el impacto en la salud es nulo, pero cuando sale de la tierra y entra en el interior de un edificio que no está correctamente ventilado puede producirse una acumulación importante del gas. «El punto clave de todo es que una vez que pasa al aire, ahí ya no hay solución para frenarlo. La única forma de evitar que lo incorporemos a nuestro cuerpo es reducir su concentración», apunta.

¿En Ourense estamos más expuestos?

«A raíz de mapas de gestión de riesgos sabemos que Ourense es un lugar donde la cantidad de radón que puede haber en el aire puede tener valores más altos que la media nacional», señala. De hecho, su laboratorio realizó medidas por Galicia y reconoce que los niveles de concentración son elevados. En todo caso, Dolores Cortina manda un mensaje positivo: «La experiencia nos dice que actuando de la manera adecuada se puede aplicar remedios de forma muy exitosa».

¿Cómo se elimina de una vivienda afectada?

Una vez que no se ha evitado que el radón entrase en una vivienda mediante el correcto aislamiento de la misma, el gran reto que se marcan desde los laboratorios especializados es lograr que salga mediante métodos de ventilación con un estudio multidisciplinar para identificar el punto de entrada del gas. A partir de ahí, el reto es buscar sistemas de ventilación para que salga de la casa. Esas medidas son diferentes, explica Dolores Cortina, en cada caso y dependen en gran medida de si la vivienda ya está construida. «Al radón hay que darle un camino más fácil que penetrar en la vivienda con un juego de presiones para que pueda salir sin que tienda a acumularse en la vivienda».

¿Qué consecuencias provoca en la salud una exposición prolongada a valores elevados?

Es una pregunta difícil de contestar para quien trabaja para combatirlo. Dolores Cortina reconoce que hay estudios que indican que es la segunda causa de cáncer de pulmón, pero prefiere centrar su discurso en cómo frenarlo. «La única forma de protegernos del gas radón es evitar que exista en cantidades elevadas. El mensaje que quiero transmitir es que cuando se habla de radiación la gente tiene miedo porque nuestros sentidos, que son nuestros mecanismos de alerta, no son capaces de sentirla. Los físicos tenemos la capacidad de poder interpretar este efecto. Nuestros detectores son los ojos que nos permiten detectar la radiación y crear mecanismos de defensa», concluye la física.

«Aplicar medidas sin base científica puede tener como resultado el efecto contrario»

En el Laboratorio de Análisis de Radiaciones de la USC no son ajenos al conflicto político que ha generado en Ourense las mediciones realizadas por el Concello en las dependencias municipales. Ourense en Común lleva semanas tratando de acceder a los informes que obran en manos del gobierno local, que opta por no divulgarlos hasta que no estén completos. Sin querer entrar en el debate político, la responsable de este laboratorio indicó: «Adelantar resultados incompletos al personal afectado puede inducir a confusión. Hay que dejar que los expertos realicen su trabajo». Apunta además que «aplicar alegremente soluciones sin mucha base científica puede tener como resultado el efecto contrario».

La marea también ha advertido que, en caso de que el resultado de los informes arroje un resultado positivo, pedirá el traslado de los trabajadores afectados. En concreto, uno de los puntos que está siendo motivo de más polémica es el sótano de la consistorial -el gas sale del subsuelo por lo que podrían verse más afectados- donde trabajan dos de los grupos de la oposición: «Todos los efectos, aunque sea por exposición muy elevada, serán en pequeñas dosis. No es algo que en una semana o en unas horas vaya a plantear un problema».