Félix Díaz y José Antonio Bermejo fueron propuestos por el presidente de la entidad ourensana, tras la baja de José Domarco
11 dic 2018 . Actualizado a las 05:00 h.La asamblea ordinaria del COB de cada temporada volvió a ser de guante blanco y en tiempo récord, apenas cuatro minutos. En primera convocatoria, aunque comenzando unos minutos después de las 20.00 horas, la fijada para su celebración, y con un quórum del 53,24%, el consejo de administración presidido por Camilo Álvarez, y con Julio César Fernández como secretario, logró sacar adelante todos los puntos del orden del día por unanimidad, algo que tampoco sorprende con la escasa participación en las últimas asambleas celebradas en el seno de la sociedad anónima deportiva.
El primero de los apartados a tomar en consideración fue la aprobación de las cuentas correspondientes a la temporada 2017/2018, que se cerró con un beneficio de 9.618,65 euros, el cual se aplicará a la reducción de las pérdidas de los ejercicios anteriores. En el segundo punto se aprobó el presupuesto de la presente temporada, que es de 604.000 euros y en el que se espera conseguir un beneficio de 2.000 euros, si se cumple la estimación económica realizada.
Y por último se procedió a la renovación de los cargos del consejo de administración de la entidad, en la cual continúa un año más como presidente Camilo Álvarez González. Julio César Fernández Vilachá actuará como secretario no consejero y Julio César Vázquez Ramiro como vocal de la junta. Al contrario, se dio cuenta de la marcha del uno de los miembros del anterior equipo rector, José Domarco Piñeiro, que se fue con una carta de renuncia por motivos de incompatibilidad con sus tareas profesionales.
Las novedades en el consejo de administración fueron presentadas a propuesta del presidente y también aprobadas por unanimidad. Se trata de Félix Díaz González y José Antonio Bermejo Domínguez, que desde ayer pasan a formar parte de una cúpula rectora que contará con un miembro más, con respecto a los que había hasta el momento.
La asamblea se cerraba con el habitual turno de ruegos y preguntas, que no registró ninguna, por lo que se dio por cerrada una de las juntas más rápidas de la historia del club de baloncesto, dándole continuidad a lo sucedido en los últimos años, aunque contando eso sí con representación del Concello de Ourense y la Diputación Provincial, máximos accionistas de la entidad. Un trámite que solo muestra mínimos cambios en el organigrama directivo.