La tortilla de patatas de siempre, a domicilio

María Doallo Freire
María Doallo OURENSE

OURENSE

Santi M. Amil

El restaurante Ñam Ñam propone comida casera en menús, platos o pinchos para llevar

21 nov 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Ñam Ñam abrió sus puertas hace ocho años en la avenida de Zamora. «En aquel momento solo había pizzas o comida china a domicilio, así que quisimos apostar por un restaurante de comida tradicional gallega que entregase también en casa», explica Belén Pérez. Esta ourensana de cuarenta años compagina la gerencia del local con su trabajo de enfermera en el Sergas. «Mi padre lleva toda la vida en hostelería y mi marido también lucha conmigo por este negocio», apunta. En agosto abrieron las puertas de un segundo espacio situado en la avenida de la Habana, donde hasta el año pasado estuvo el bar Melón. «A principios del 2020 se nos planteó la oportunidad y para nosotros era una forma de avanzar. La pandemia nos pilló en mitad de la reforma pero lo cierto es que estamos muy contentos con lo que hemos conseguido», explica Belén.

En su día llegó a tener a 15 personas trabajando en Ñam Ñam, aunque actualmente gran parte de la plantilla está en ERTE. «La gente está respondiendo muy bien ante esta situación. Se hacen colas para el café y el pincho de la mañana y para los menús de mediodía», admite. Compuestos de un primero, un segundo y un postre por 11 euros, entre semana. Carnes, verduras y pescados frescos protagonizan las propuestas de cada día. «Es comida totalmente casera y hecha en el día», afirma Belén. «Lo que más sale son las tortillas de patatas. Ahora también triunfan las pizzas, que añadimos a la carta hace muy poquito y eso que creí que por el exceso de competencia no se pedirían», continúa. Esta hostelera y enfermera ourensana dice que si antes un domingo salían cien pedidos, ahora salen cincuenta: «No me puedo quejar porque otros están mucho peor. Me siento agradecida a la gente que confía en nosotros y que no para de pedir». Tiene clientes que incluso comen de Ñam Ñam todos los días. ¡Qué aproveche!