Alrededor de 7.500 ourensanos padecen psoriasis, el 30 % en grado moderado o grave
OURENSE
En los casos más avanzados la enfermedad está asociada a otras patologías, como artritis, obesidad, depresión o diabetes
31 oct 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Alrededor de 7.500 ourensanos padecen psoriasis, la mayoría —en torno al 70 %— leve, con buena respuesta a tratamientos tópicos. El otro 30 % de los casos pueden evolucionar hacia cuadros moderados o graves, a veces con afectación articular. Son los datos aportados desde el servicio de Dermatología del CHUO coincidiendo con el día mundial de la enfermedad. Subrayan la importancia del diagnóstico precoz y del inicio temprano del tratamiento.
Desde el servicio especializado aseguran que lo primero que hay que hacer es consultar al médico de cabecera ante síntomas de la piel. Muchos pacientes son tratados directamente en atención primaria, aunque los casos más avanzados precisas de una consulta especializada. Es entonces cuando son derivados al CHUO.
La psoriasis se caracteriza por una renovación excesiva de las capas superficiales de la piel, que provoca placas rojas y descamación visible, cubiertas por escamas blancas y secas, localizadas principalmente en los codos, las rodillas, el tronco o el cuero cabelludo. «Como enfermidade crónica que é ten unha discapacidade acumulada nos pacientes. Hai moitos que deixan de facer cousas no seu día a día ou que se cohiben na forma de relacionarse pola propia enfermidade», apunta la dermatóloga María Pousa. De hecho, asegura que es algo que tienen que preguntar en la consulta para saber hasta qué punto influye la patología a los pacientes.
Va más allá de una simple afección cutánea. Se trata de una enfermedad inflamatoria, crónica, sistémica y de base inmunológica, que puede tener un efecto dominó sobre la salud del paciente. Pero no es contagiosa. «Non hai risco ao tocar a unha persoa con psoríase», remarca Pousa.
Aunque suele asociarse a la piel, también puede afectar a las articulaciones y se relaciona con múltiples comorbilidades, como la artritis psoriásica, la enfermedad cardiovascular, la obesidad, la depresión o la diabetes. No presenta diferencias de prevalencia entre hombres y mujeres y puede manifestarse a cualquier edad.
Tratamientos biológicos
Durante décadas, los tratamientos se centraron en aliviar los síntomas visibles, pero la medicina ha evolucionado hacia un enfoque más ambicioso: modificar el curso de la enfermedad. Este nuevo paradigma implica actuar de forma temprana y eficaz, no solo para mejorar los síntomas, sino también para evitar daños estructurales y frenar la progresión.
Los avances en investigación han permitido en los últimos años el desarrollo de nuevos tratamientos biológicos que actúan directamente sobre los mecanismos inflamatorios de la enfermedad. «Contamos con moléculas moi eficaces que nos permiten tratar a inflamación de xeito específico e mellorar a calidade de vida dos pacientes», destaca Pousa. En todo caso, insiste en que cada paciente es distinto y por esto también lo es cada tratamiento. «Debe adaptarse a sus necesidades, expectativas e incluso a sus fobias, como el miedo a las agujas», concluye la dermatóloga del CHUO.