Los jóvenes Diego Fernández y Alejandro Munín abren el bar Oasis en su pueblo natal
20 jul 2021 . Actualizado a las 05:00 h.Alejandro Munín (A Peroxa, 1992) estuvo varios años trabajando como disyóquey en distintos pubs del casco viejo de la capital ourensana. Pinchó en el Tokyo, en el Basic o en la sala Balenciaga, entre otros. A raíz de la pandemia y de las consecuencias que ha traído sobre el sector del ocio nocturno, decidió que ya era el momento de abrir algo por su cuenta. Lo hizo de la mano de su amigo Diego Fernández (A Peroxa, 1998). «Teníamos ganas de montar un negocio y quisimos hacerlo en nuestro pueblo. Volver a casa y traer con nosotros la puesta en marcha de un local joven y nuevo», explica Alejandro. Se llama Oasis y está situado en el centro del municipio. «La intención inicial era abrir un pub pero vista la situación, preferimos apostar por un local que abarcase todas las horas del día», continúa.
Su oferta empieza a primera hora, con los cafés de la mañana, para cuya elaboración utilizan uno 100 % natural y ecológico. Después llegan los vinos de la hora del vermú y las visitas de grupos de amigos por la tarde. Por las noches, con la bajada del calor y la caída del sol, es el momento de tomarse una copa o un cóctel y ese es el momento en el que disfrutar de un poco de música. «El espacio está insonorizado y eso hace que se pueda escuchar la música sin problema», dice Alejandro. Sobre todo está triunfando entre la gente joven de A Peroxa, que ahora encuentran en el Oasis, un punto de encuentro en el que quedar, charlar y divertirse. Aunque la intención de los dos jóvenes que llevan el bar es crear un ambiente agradable para todos los públicos. «Nosotros somos del pueblo, siempre hemos estado vinculados con él. Aquí nos conocemos todos y la verdad es que los vecinos nos están dando una gran acogida. Estamos muy contentos y agradecidos», termina este disyóquey Alejandro.