Un acusado de atropellar a una mujer que estuvo 45 días en coma se disculpa con ella

Marta Vázquez Fernández
m. vázquez OURENSE / LA VOZ

OURENSE CIUDAD

Santi M. Amil

El conductor, con dos condenas previas, dio positivo el alcohol. Tenía el carné retirado

23 ene 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

A medianoche del 5 de junio del 2017 una mujer se apeaba de un coche en la calle Progreso de la capital ourensana cuando fue brutalmente atropellada por otro turismo. El fuerte golpe la lanzó contra la parte de atrás del Mercedes que la arrolló, contra la que se golpeó antes de caer al suelo, sufriendo graves traumatismos por los que tuvo que ser ingresada en el complexo hospitalario de Ourense. Estuvo mes y medio en coma.

Este miércoles el hombre que iba al volante de aquel automóvil debía sentarse en el banquillo de los acusados del juzgado de lo penal para responder del delito de lesiones imprudentes que le imputó el ministerio fiscal. Dio positivo en alcohol, con una tasa de 0,90 miligramos, tras el accidente pero, además, se cree que no se detuvo en el mismo instante del choque, sino que lo hizo tras colisionar hasta con cuatro coches más, siendo localizado por los agentes policiales en un bar de la misma calle en la que ocurrieron los hechos. Se da la circunstancia, además, de que a Bautista R. G. ya le constaban dos sentencias anteriores, firmes ambas, por delitos de conducción bajo los efectos del alcohol y, para rizar el rizo en este caso, tenía retirado el permiso de conducir cuando tuvo lugar este terrible episodio.

Así que el ministerio público solicitaba que el acusado fuera condenado a seis meses de cárcel, con la retirada del permiso de conducir durante cuatro años, pero finalmente la vista tuvo que aplazarse por la imposibilidad de que pudiera declarar un testigo crucial para la defensa. Se trata de la persona que iba en el coche con el acusado, y que debía prestar testimonio desde Huesca, pero al ser festivo allí no se pudo materializar esa llamada, por lo que el juicio se aplazó hasta el 22 de abril.

Tuvo que ir al baño

No obstante acusado y perjudicada se cruzaron en el pasillo del juzgado. Él se acercó a ella y le pidió disculpas, para luego explicar ante los periodistas algunos detalles sobre cómo, según él, tuvo lugar el accidente por el que ahora se le piden responsabilidades penales. Así, Bautista asegura que no vio a la víctima porque ella apareció de repente para subir al coche, y aclaró también que no se dio a la fuga, sino que paró un poco más adelante del lugar del choque y se metió en un bar porque, debido a los nervios por lo ocurrido, tenía que ir al baño urgentemente. Estaba dentro del servicio de caballeros, de hecho, cuando fue localizado por los agentes. Alega también el acusado que su carné de conducir estaba vigente en aquel momento.

Pero esto no es lo que sostienen las acusaciones tanto pública como particular, que ejerce la propia víctima. Según ellos el acusado, de 49 años, había sido condenado previamente por delito de conducción bajo los efectos del alcohol en el 2011 y en 2015, estando «privado provisionalmente por resolución judicial del permiso de conducir desde el 5 de junio del 2017 hasta el 17 de julio del 2018». Esto implicaría que obvió esta prohibición cuando se puso al volante de su Mercedes 6066 el mismo día en el que se iniciaba, haciéndolo además tras haber bebido alcohol, ya que su primera tasa triplicaba a la máxima permita por la legislación vial, de 0,25 miligramos de alcohol por litro de aire espirado.

Al juicio estaban citados más de una veintena de testigos y peritos, con los que las partes pretenden hacer una reconstrucción de cómo ocurrió el atropello en la céntrica calle; también será clave la declaración de los forenses que valoraron a la víctima, a la hora de establecer la responsabilidad civil derivada del accidente. El informe de fiscalía ya refleja que la mujer, de 57 años, ha sufrido una pérdida de calidad de vida, quedando incapacitada para trabajar.