Seis concellos ourensanos se exponen a perder ayudas por no rendir cuentas

Miguel Ascón Belver
miguel ascón OURENSE

SAN XOÁN DE RÍO

Santi M. Amil

Otros dos ayuntamientos han presentado la documentación con defectos graves

12 ene 2019 . Actualizado a las 10:35 h.

Si mañana se convocan unas subvenciones de la Xunta de Galicia, seis concellos ourensanos no podrán optar a ellas porque no han cumplido con sus obligaciones con el Consello de Contas. Todos los ayuntamientos están forzados a enviar sus datos económicos del ejercicio anterior antes de cada día 15 de octubre, pero esos seis -que son A Rúa, Lobios, Melón, Os Blancos, Pontedeva y Verín- aún no han remitido sus cuentas del año 2017. Acumulan, por lo tanto, tres meses de retraso sobre los plazos establecidos.

Además, a fecha de ayer, el Consello de Contas tampoco había recibido la documentación de cuatro mancomunidades, algunas de ellas en proceso de disolución o prácticamente sin actividad. Todas las entidades que no han informado al organismo encargado de fiscalizar su actividad se exponen a no poder solicitar subvenciones de la Xunta de Galicia. El gobierno autonómico puso se puso en marcha esa norma en el año 2011 para poner freno a la falta de transparencia de los ayuntamientos.

Tras su implantación, el número de concellos que no rinden cuentas se ha reducido notablemente. De hecho, de los 92 que hay en la provincia solo seis, los citados, han incumplido su obligación. Aunque muchos lo han hecho fuera de plazo, ahora ya podrán solicitar las subvenciones que convoque la Xunta y también podrán hacerlo los ayuntamientos de A Rúa, Lobios, Melón, Os Blancos, Pontedeva y Verín si finalmente rinden cuentas ante el organismo fiscalizador.

Cabe destacar, por otra parte, que algunos de los concellos que sí han cumplido con el Consello de Contas en tiempo, no lo han hecho en forma. Así, dos entidades locales de la provincia -Carballeda de Avia y Piñor- enviaron sus cuentas con defectos calificados como graves por parte de ese organismo. Las deficiencias detectadas tienen la calificación de leve en el caso de A Merca, A Mezquita, A Peroxa, A Pobra de Trives, A Veiga, Bande, Barbadás, Boborás, Castrelo de Miño, Castrelo do Val, Cortegada, Esgos, Gomesende, Nogueira de Ramuín, O Barco de Valdeorras, O Bolo, O Carballiño, O Irixo, Padrenda, Rairiz de Veiga, Ramirás, Riós, San Amaro, San Cristovo de Cea, San Xoán de Río, Taboadela, Toén, Viana do Bolo, Vilamartín de Valdeorras, Vilariño de Conso y Xunqueira de Espadañedo.

En el caso de la Diputación ourensana, el Consello de Contas concluyó que la documentación enviada por la institución provincial (que llegó en plazo, concretamente el 11 de octubre) contiene también defectos leves.

El de Ourense ya aprobó la liquidación en pleno pero el documento aún no se ha evaluado

La posibilidad de exponerse a perder subvenciones por no cumplir con el Consello de Contas ha sido objeto de polémica en las últimas semanas en la capital ourensana. Como es habitual, el Concello de Ourense iba con retraso en la tramitación de la aprobación de sus cuentas generales del año 2017 y su aprobación se demoró hasta el lunes de esta misma semana.

Con datos actualizados este viernes, el organismo encargado de fiscalizar la actividad económica de las entidades locales gallegas detalla en su página web que aún no ha recibido la documentación del Ayuntamiento ourensano. Además, en cuanto esté allí, deberá ser evaluada por sus técnicos para comprobar si todo esta correcto o, por el contrario, se detectan defectos o carencias. Si las cuentas cumplen con lo establecido en la normativa, el Concello de Ourense podrá optar sin problemas a cualquier subvención que convoque la Xunta de Galicia.

Críticas de la oposición por la gestión económica popular

Pese a ello, la oposición no ha perdido la oportunidad de criticar la gestión económica del gobierno local. A la demora en cumplir con el Consello de Contas se suman otros problemas, como el retraso que acumula el Concello con el período medio de pago a proveedores o el hecho de que aún no se hayan sometido a debate plenario los presupuestos municipales en los más de tres años que van de mandato.