Censo y elecciones

Miguel Ascón Belver
Miguel Ascón A LA CAÍDA

XINZO DE LIMIA

22 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Anda el Concello de Xinzo buscando soluciones para no bajar de los 10.000 habitantes por todo lo que ello implica, especialmente en el reparto de fondos que hacen otras Administraciones, que muchas veces se hace en función del número de habitantes de cada municipio. El gobierno de la capital de A Limia quiere evitar las bajas irregulares de vecinos que se censan en otros concellos, en muchas ocasiones para así pagar menos impuestos, pero que realmente sí viven en Xinzo. Es algo encomiable porque la ley establece claramente que el empadronamiento debe realizarse en el municipio en el que se reside habitualmente.

En el PP, no obstante, saben bien cómo engordar el censo, y especialmente en Xinzo. Aunque, claro, para eso tienen que celebrarse elecciones. Ocurrió, por ejemplo, en el año 2011, cuando una vecina de la localidad denunció que había recibido en su casas las tarjetas censales de Agustín Prado Verdeal, exdelegado de Medio Ambiente en la Xunta con el Partido Popular, así como de varios de los familiares de este. Ella no los conocía de nada y, claro, se sorprendió. Resulta, según dijo el Concello, que el número de la calle había sido alterado por error, pero tampoco en la otra vivienda residía en citado Prado Verdeal. El BNG denunció el caso e incluso recurrió a la Justicia, pero la investigación quedó en nada.

Es evidente que ese sistema de engorde del censo es efectivo. Quizás se hubiera pronto unas elecciones en Xinzo no tendrían que andar buscando vecinos no empadronados, pero en ese caso se cambiaría una irregularidad por otra.