Un posible acuerdo sobrevuela el arranque hoy del juicio por fraude fiscal contra el rey de las verbenas

Alfredo López Penide
L. penide PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

CAPOTILLO

Ángel Martínez Pérez, «Lito», tiene esta mañana una cita con la Audiencia de Pontevedra

20 abr 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El considerado como el rey de las verbenas de Galicia, Ángel Martínez Pérez, Lito, tiene esta mañana una cita con la Audiencia de Pontevedra para responder de los seis delitos de fraude fiscal que le imputa la Fiscalía. Se trata de cargos por los que el ministerio público solicita un total de catorce años de cárcel y cerca de veintidós millones de euros en multas. Por su parte, para su empresa, Representaciones Lito, se pide una sanción similar, así como se insta a que le imponga una indemnización de más de 9,5 millones a favor del Estado.

En los últimos días, distintas fuentes han señalado que se habrían producido una serie de movimientos que, en principio, estarían encaminados en tantear la posibilidad de llegar a un acuerdo que permita reducir la pena de prisión, así como las sanciones económicas pedidas inicialmente. No obstante, al cierre de esta edición, estas mismas fuentes confirmaron que, por el momento, no se había formalizado ningún tipo de pacto de conformidad, lo que no descarta que se pueda alcanzar en los momentos previos al inicio del juicio.

En todo caso, desde el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) confirmaron que nada había modificado la celebración del mismo por parte de la sección cuarta de la Audiencia.

El fiscal defiende que Representaciones Lito declaraba un pequeño porcentaje de lo que ganaba: «La contabilidad oficial no recoge la imagen fiel de la empresa, así se contabilizan el 100 % de los ingresos de los clientes que quieren factura, aproximadamente un 8 % de lo facturado, y no se contabilizan los que no la quieren».

En base a los informes elaborados por los técnicos de la Agencia Tributaria, llega a la conclusión de que se pudieron haber declarado poco más de cuatro millones en los ejercicios 2011 y 2012, cuando habrían ingresado casi 50, 26.096.785 euros en el primero y 21.975.441 euros en el segundo.

En su escrito incide en que la documentación oficial «tampoco se recogen los gastos por los servicios de las orquestas, que son opacas, ni los de los representantes». Por el contrario, puntualiza que «se contabilizan como gastos facturas emitidas por otras empresas del grupo».

Silencio roto

Desde que se conoció esta investigación, Ángel Martínez ha guardado silencio. Solo lo rompió en los albores de la instrucción mediante un comunicado en el que atacó el criterio de la Agencia Tributaria de considerar que la compañía «no es un mero representante, sino que produce y vende espectáculos musicales completos, lo cual es radicalmente falso». Remarcó que la firma «es un intermediario entre el grupo musical, cuyos músicos se rigen por el régimen especial de artistas [...], que establece que son trabajadores por cuenta ajena y, por tanto, no están sujetos a IVA; y el cliente final».