José María Graíño: «Hay preocupación por parte de las personas en dejar ordenada su sucesión como consecuencia de la pandemia»

Marcos Gago Otero
Marcos Gago PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

CAPOTILLO

El nuevo decano del Colegio Notarial de Galicia destaca el papel de su profesión en la protección de las personas mayores y los menores

24 nov 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

José María Graíño Ordóñez (Ponteceso, 1958) es el nuevo decano de los notarios gallegos tras las elecciones que se celebraron este mes. Empezó a ejercer la profesión de notario en 1987 y en la actualidad tiene su despacho en Caldas de Reis.

-¿Cómo está siendo el trabajo de un notario en estos tiempos del covid?

-En esta situación de pandemia los notarios como servicio público esencial hemos estado presentes y disponibles atendiendo las necesidades de las personas y las empresas.

-¿Ha cambiado el perfil del trabajo que ustedes desarrollan?

-Efectivamente, dada la incertidumbre de la vida en estos tiempos, las personas tienen mayor preocupación por ordenar su sucesión. Esto ha incidido en que se ha aumentado la autorización de escrituras donde se recogen pactos sucesorios de mejora y las apartaciones, que son las dos modalidades de la herencia en vida. Sí que han aumentado dada esta situación de pandemia y, al mismo tiempo, a que se van a reformar aspectos fiscales con el proyecto de Ley de Prevención y Lucha contra el Fraude Fiscal que va a alterar la fiscalidad de los pactos sucesorios en tanto en cuanto a la repercusión que va a tener en el IRPF. Esencialmente, y para ser breves, lo que va a determinar es que a efectos de valoraciones, si se transmiten los bienes que han sido adjudicados a través de estos pactos de mejora antes del fallecimiento del adjudicante, se va a tomar como fecha y valor de adquisición los que correspondían al adjudicante. También hay un aumento en el número de testamentos, se han hecho bastantes. De toda esta clase de documentos se han hecho muchos después del levantamiento del confinamiento cuando la gente ya podía ir con regularidad a la notaría.

-¿Han notado alguna diferencia entre el ámbito rural y el urbano en este comportamiento?

-Este comportamiento se da en todos los ámbitos, es extensible a todos los ámbitos y a toda Galicia. Hay una generalización por parte de las personas en dejar ordenada su sucesión como consecuencia de las circunstancias que estamos viviendo. Esa preocupación se nota.

-¿Se nota algún crecimiento más en algún otro ámbito de su actividad?

-Sí, en el otorgamiento de los poderes preventivos y de las voluntades anticipadas, así también como las escrituras de autotutela o autocuratela. Notamos un repunte, se han hecho bastantes. Por poderes preventivos se refiere a que una persona en previsión de una futura discapacidad otorga un poder a favor de la persona con la que tiene una relación de confianza para que le represente en su esfera personal y patrimonial siempre y cuando se produzca esa incapacidad. La autotutela o autocuratela es otra escritura que también se hace mucho.

-¿Cómo actúan ante las personas mayores?

-Tenemos que proteger muchísimo siempre a las personas mayores cuando hacen algún acto de transmisión de bienes, eso viene en relación con los pactos sucesorios de mejora. No podemos solo enfocar el planteamiento de hacer una escritura por el tema fiscal. Sí es importante el tema fiscal, pero tenemos que proteger a las personas mayores para que no queden sin los bienes que puedan necesitar en el futuro. En caso de que hagan esas transmisiones, que se reserven el usufructo, que se impongan determinadas condiciones de que los cuiden, los asistan a ellos o a terceras personas, y otras medidas que siempre redundan en proteger a las personas más vulnerables. El notariado proyecta esta protección a las personas mayores, a los discapacitados y también cuando vemos que hay situaciones que puedan afectar a menores en situación de desamparo, tenemos también que llevar una actuación para protegerlos con su comunicación a la Fiscalía. Debemos proteger a los ciudadanos más vulnerables y a los más débiles y desde el notariado tenemos muchos instrumentos jurídicos para protegerlos.

-Uno de los temas de más actualidad en estos tiempos de pandemia es la digitalización de la función pública, ¿cómo ven los notarios la aplicación de las nuevas tecnologías?

-Hacemos una apuesta por la digitalización y desarrollo de la Administración electrónica. Hay ya una directiva europea pendiente de trasponer en España que permitirá la constitución de sociedades en línea sin la presencia física del notario. Pero esto no implica que no siga siendo imprescindible y necesario la identificación, valoración y juicio d capacidad ante el notario, pero por sistemas de vídeo, realizadas con todos los parámetros de seguridad que garanticen una interacción de las partes con el notario. El notariado tiene un desarrollo de sistemas informáticos muy importante desde hace muchos años y contamos con todos los medios.

-En la sociedad hay preocupación por las okupaciones.

-Sí, los notarios estamos preocupados también esa problemática. Si en la búsqueda de soluciones está el contar con la actuación notarial, los notarios así lo haremos como funcionarios públicos que somos.

-En materia de contratos, ¿cuáles son las novedades más importantes?

-En la fase precontractual, los notarios hemos intensificado nuestra actividad en los últimos años. Ejemplo de ello es la reciente Ley de Contrato de Crédito Inmobiliario en la que se prevé que las personas comparezcan ante notario a fin de formalizar un acta previa donde se les explica en forma detenida y detalladamente de las específicas condiciones y obligaciones que asuman al firmar el préstamo hipotecario. Esto es muy importante porque supone que las personas tengan un consentimiento libre e informado antes de firmar una escritura de préstamo hipotecario.

-Otro de los cambios de estos últimos años en cuanto a la actividad de los notarios es que ustedes ahora pueden casar. ¿La gente se apunta ya con normalidad a esta modalidad para celebrar su boda?

-Desde la Ley de Jurisdicción Voluntaria del 2015 los notarios ya podemos realizar lo que es la escritura de celebración del matrimonio porque el expediente previo se sigue tramitando en el registro civil. Sí, hay cada vez más personas que vienen y se casan en las notarías, así como también se hacen escrituras de separación o divorcio siempre que hayan transcurrido al menos tres meses desde la celebración del matrimonio, sea de mutuo acuerdo y no haya menores o dependientes, y con la asistencia de un abogado. Se debe acompañar un convenio regulador, que contenga los acuerdos sobre la atribución de la vivienda y ajuar familiar, la liquidación cuando proceda de la sociedad de gananciales y en su caso, pensión compensatoria o indemnizatoria. Son aspectos que la Ley del 2015 nos ha otorgado a los notarios, que son la celebración del matrimonio, la separación o el divorcio.

-¿Y usted ha casado mucho en estos cinco años?

-Más o menos entre diez y quince, no muchos, quizás en el ámbito urbano se nota más por lo que me dicen los compañeros.

-¿Y divorcios ha hecho muchos?

-He hecho más divorcios y separaciones que matrimonios.

-¿Está normalizado el gallego en la gestión de su sector?

-Por supuesto en las notarías respetamos plenamente el ejercicio del derecho lingüístico de aquellas personas que nos piden que las escrituras se les hagan en gallego, se les hace así. Y en lo cotidiano, hablas en gallego, se busca la proximidad, el notariado siempre ha estado atento y somos partidarios de que las personas ejercite sus derechos con normalidad. La gente que te dice que quiere una escritura en gallego por supuesto que se la haces.

-¿Cree que es adecuada la actual distribución de notarías en Galicia o habría que replantearla?

-Yo creo que es correcta. Actualmente hay 163 notarías y creo que en casi todos los pueblos hay en un radio de no muchos kilómetros y notario dispuesto a ejercer. Creo que está bien distribuido.

-¿Cree que el ciudadano de a pie es consciente de las opciones que les ofrece una notaría?

-Hay muchas cosas que la gente desconoce. A los notarios nos encanta, porque lo llevamos en el ADN de nuestra formación, informar, adelantar incluso posibles reformas que puedan afectar al ámbito del derecho privado. Las personas que acuden a los despachos, estamos encantados no solo de autorizar la escritura pública concreta o la celebración de una póliza mercantil, sino que aprovechamos muchas veces todas las preguntas que nos hacen las personas a responderles y explicarles todas las posibilidades que hay en derecho para poder regular tanto su aspecto personal como su aspecto patrimonial.