Los estafadores de los contadores eléctricos pactan y esquivan la cárcel

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

A LAMA

Llegaron a un acuerdo sobre las indemnizaciones y aceptaron año y medio de prisión

20 abr 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Un acuerdo con el fiscal y las acusaciones ha permitido que los dos sospechosos de manipular contadores eléctricos en empresas y sociedades de toda la provincia no tengan que pisar la prisión de A Lama. Tanto I. L. T. como L. P. F., quienes inicialmente se enfrentaban a una petición de pena de cuatro años y seis meses de prisión por estafa, aceptaron ayer en el Juzgado de lo Penal número dos de Pontevedra un año y medio de cárcel.

Según trascendió, el cumplimiento de esta pena y, por tanto, el internamiento en un centro penitenciario ha sido suspendido a condición de que ambos encausados no delincan en el plazo de dos años. De igual modo, estos habrían abonado ya las indemnizaciones que, al parecer, negociaron con los distintos damnificados y que, supuestamente, suman una cantidad sensiblemente inferior a los 78.335 euros consignados como montante global en el escrito de acusación del fiscal.

Ambos orquestaron entre el 2011 y el 2012 un entramado mediante el cual comercializaban e instalaban lo que anunciaban como equipos de eficiencia energética con los que afirmaban que mejoraban el rendimiento de la instalación eléctrica reduciendo el coste de la factura entre un 8 y un 35 %. Era falso. La realidad es que para rebajar los costes de consumo eléctrico, los acusados manipulaban los contadores eléctricos en las empresas en las que instalaban sus equipos.

De este modo, lograron engañar a diecisiete empresas y sociedades de Pontevedra, Redondela, Vigo, O Porriño y Nigrán, entre otras localidades de la provincia de Pontevedra. Esto les permitió obtener 47.200 euros de beneficios, cantidad a la que habría que añadir los 31.135 euros de perjuicio generado a Unión Fenosa por el corte de los precintos y la manipulación de los contadores.

El modus operandi

De este modo, en la práctica totalidad de los casos, los dos compinches, una vez cobrado el dinero de la instalación, llevaban a cabo la estafa. De este modo, al mismo tiempo que procedían a instalar sus equipamientos, forzaban los precintos del cuadro de contadores y manipulaban estos para simular un consumo inferior al realmente producido.

El Casino Mercantil adquirió dos equipos para sus instalaciones

Entre las víctimas de esta estafa, el fiscal reseña el caso concreto del Casino Mercantil e Industrial de Pontevedra. El 24 de noviembre del 2011 y el 1 de diciembre de este mismo año, uno de los sospechosos, I. L. T., vendió a la sociedad capitalina sendos equipos por 1.851 y 1.180 euros. De este modo, al mismo tiempo que cobraba estas cantidades, violentó los precintos del cuadro de contadores para, de este modo, poder manipularlos con el objetivo de que «registraran un consumo inferior al realmente producido». De este modo, aparentó que el consumo, gracias al equipo instalado, era inferior al propio y habitual de los dos locales.