Aun estando bajo, el nivel del Lérez garantiza agua hasta finales de agosto
PONTEVEDRA CIUDAD
El Concello mantiene en reserva el Pontillón, que está al 96 % de su capacidad
20 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Pontevedra no tiene problemas de abastecimiento agua ni se vislumbran en un futuro cercano. Aunque el nivel del río Lérez es bajo para esta época del año, está muy lejos de entrar en situación de alarma. Un informe elaborado por la empresa concesionaria, Viaqua, para el Concello concluye que aunque se cumplan las previsiones de un verano caluroso y seco, el caudal se mantendrá dentro de los límites aptos para la captación «ata finais de agosto ou principios de setembro». Y llegado el caso, el abastecimiento está garantizado ya que existe la reserva del embalse del Pontillón de Castro, que está al 96 % de capacidad.
El pasado martes, el caudal medio del Lérez era de 4,30 metros cúbicos por segundo. Es más bajo que los 5,69 de hace un año pero infinitamente mejor que los 0,86 que se registraron a estas alturas de julio del 2013, cuando hubo que imponer restricciones desde el Concello. Precisamente, el caudal límite para la utilización de la estación de bombeo son 0,85 metros cúbicos por segundo.
El concejal del Ciclo da Auga, Raimundo González Carballo (BNG), subrayó ayer que «a situación non é excesivamente preocupante». Estos días están saliendo de la estación de tratamiento de Couso (Xeve) unos 35.000 metros cúbicos de agua diarios, suficientes para abastecer a una población de unas 160.000 personas. Y es que el agua del Lérez no solo llega a Pontevedra. También se sirve a Marín, Poio, Bueu, Sanxenxo y Ponte Caldelas, ya que la ampliación del polígono industrial del Campiño también usa agua de la captación de Monte Porreiro.
Desde Viaqua se subraya que menos de la mitad de esos 35.000 metros cúbicos se consumen en Pontevedra y el resto va para otros municipios.
Aunque la situación dista mucho de ser alarmante, González Carballo no evitó hacer un llamamiento a un consumo responsable. «Estamos a facer un seguimento constante da evolución do río -indicó-. De momento non son necesarias restricións, pero si facemos un chamamento a un uso racional da auga, máis como medida medioambiental que por perigo real de escasez».