El Pontevedra afina la puntería

Aleixandre Méndez
Aleixandre Méndez PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

OSCAR VIFER

Los de Luisito han marcado en seis de sus siete duelos de pretemporada

11 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El Pontevedra apura sus últimos días de preparación previos al inicio liguero con la sensación de haber encontrado el camino correcto. Las duras sesiones de entrenamiento a las que ha sometido Luisito a sus jugadores desde el inicio de la pretemporada el pasado 17 de julio parecen estar dando sus frutos, a tenor del balance de victorias y derrotas que acumulan los granates en los amistosos disputados. No en vano, de los siete duelos que ha jugado en las últimas tres semanas, el Pontevedra ha ganado cinco y solo ha perdido dos. Y de estos últimos, ambos han sido ante rivales de superior categoría: en el Trofeo Luis Otero por 0-5 ante todo un Primera como el Dépor, y en el Trofeo Ciudad de Pontevedra por 1 a 3 frente a un Sporting de Gijón recién descendido a Segunda.

En cuanto al resto de duelos, el equipo granate ha sido capaz de marcar en todos ellos. Lo hizo ante el Coruxo, el único rival de su categoría al que se ha medido, al que venció por 2 a 0 en solo 45 minutos en el triangular Carneiro ó Espeto de Moraña. Y en ese mismo torneo, también se impuso al Arousa, equipo de Tercera, por 1 a 0 jugando también solo la mitad del tiempo de un partido normal.

Tras este doble triunfo, que se produjo después de la derrota ante el Dépor y antes de la encajada frente al Sporting, el resto de encuentros disputados por los de Luisito han sido ante rivales de menor categoría, y en estos los granates han hecho valer su teórica superioridad. Lo hicieron el pasado sábado frente al Porriño, al que vencieron por 2 a 0, y el domingo todavía con más claridad frente al Estradense, al que superaron por 0-4. Y solo el Céltiga ha sido capaz de volver a marcarle en el encuentro que concluyó el miércoles con 1 a 3 favorable a los granates.

Pero más allá de los resultados y la frialdad de los números, que indican que el Pontevedra ha marcado trece goles en estos siete duelos y ha encajado nueve, la mejor noticia para Luisito está siendo la capacidad de sus pupilos de repartirse la responsabilidad anotadora. Etxániz estrenó la cuenta goleadora granate ante el Coruxo, en un duelo en el que también marcó Carlos Ramos. Y ese mismo día, Añón se sumó a la lista sumando otro tanto frente al Arousa, en este caso de penalti.

Después, frente al Sporting, Jorge Hernández estrenó su cuenta pese a la derrota, y desde entonces el Pontevedra cuenta sus partidos de preparación por victorias. Ante el Porriño, se sumaron a la fiesta los canteranos Antón y Lezcano. Y un día más tarde fueron Carlos Ramos, que ya había marcado ante el Coruxo, Adrián León y Marcos Álvarez, en dos ocasiones, los autores de los goles frente al Estradense. Una nómina de goleadores en la que se colaron el miércoles Mouriño y Álex Fernández, mientras que Adrián León se sumó a Carlos Ramos y Marcos Álvarez en la lista de granates que han marcado más de un gol elevándose a diez el número de jugadores que han visto puerta esta pretemporada.

A la espera de otro delantero

Con este balance, el Pontevedra gana confianza de cara al inminente comienzo de la liga, para el que cada vez parece más complicado que Luisito pueda contar con el ansiado refuerzo para el ataque que lleva esperando todo el verano. Ayer, el director deportivo granate, Roberto Feáns, evitaba dar plazos para la llegada de este último fichaje, recordando que el mercado sigue abierto hasta final de mes. Aunque, a la vez, aseguró que no descarta que haya sorpresas en los próximos días.

Los granates se encomiendan a la Virgen Peregrina

Como viene siendo habitual cada temporada desde tiempos inmemoriales, plantilla, cuerpo técnico y miembros del consejo de administración del Pontevedra acudieron ayer al santuario de la Peregrina para asistir a una misa y hacer una ofrenda floral a la Virgen. El acto, que contó también con la presencia de algunos jugadores históricos del equipo pontevedrés, dio paso después a la también tradicional comida de principio de curso, que tuvo lugar en el Hotel Campaniola.