El mediapunta José García será granate hasta final de temporada

Nieves D. Amil
NIeves D. Amil PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

RAMON LEIRO

Este miércoles ya se entrenó con el equipo y estaría disponible para el domingo

22 ene 2020 . Actualizado a las 18:20 h.

Jorge García ya entrenó este miércoles en el campo de A Seca junto a los que serán sus compañeros hasta final de temporada. El jugador, procedente del Atlético Baleares, llega al Pontevedra en calidad de cedido por el Extremadura hasta final de temporada y después «puede pasar cualquier cosa». Parece que su continuidad en el equipo dependerá de su rendimiento, pero el jugador pamplonica es propiedad del conjunto extremeño los próximos dos años.

En lo que va de campeonato tan solo jugó 87 minutos con la camiseta balear, lo que supondrá una puesta a punto exprés para intentar entrar ya en la convocatoria de esta semana.

García reconoce que se encuentra en forma a pesar de no haber gozado de minutos. «Físicamente estoy bien, pero espero ir a mejor. Vengo de entrenar, también he estado haciéndolo por mi cuenta porque cuando uno no juega, no está físicamente como el resto», puntualizó. La llegada del centrocampista abre la oportunidad a Pouso de ponerlo en diferentes posiciones, pero si él tuviera que elegir donde se siente más cómodo, optaría por hacerlo como medio punta interior. Ha jugado también como extremo e incluso como falso nueve, posición a la que le cuesta más adaptarse. «No es habitual para mí, aunque yo juego en diversos puestos arriba», puntualizó el ex del Atlético Baleares, que advierte de que el gol no es una de sus cualidades. La media con la que llega no lo hace determinante en punta, pero «todo lo que tenga oportunidad de sumar, lo haré». Los últimos tres goles que marcó fueron en la temporada 2017-18 con el Alcoyano.

Carlos Pouso presentó ayer el jugador a sus nuevos compañeros y según ha explicado él, «me dijo que no me rinda y en el momento en el que tenga que quejarme a alguien que sea a él», comenta. El míster fue quien le convenció de venirse al Pontevedra, pero la operación se ha dilatado más de lo previsto. Ahora, José García quiere olvidar ese proceso y centrarse ya en la preparación para el encuentro de este domingo contra el Sporting B. «Con una llamada me convenció, sabe como soy y me dijo que trabaje, que él ya me conoce», explicó José García, que este miércoles presenció el toque de atención de Carlos Pouso a la plantilla al término del entrenamiento en A Seca.

Cabreo de Carlos Pauso

Aparentemente molesto con los jugadores, el entrenador los junto al finalizar la sesión para reprocharles la falta de intensidad durante toda la mañana. «Esto ha sido una basura», les decía un Pouso, que continuó con el rapapolvos a la plantilla, a la que advertía de la necesidad de ponerse las pilas para poder plantarle cara al filial del Sporting este fin de semana. «Igual fue para que el equipo no se relaje, eso viene bien para que esté todo el mundo alerta», comentó García, intentando sacar hierro a lo ocurrido en A Seca.

El jugador estuvo viendo el último partido contra el Racing de Ferrol y asegura que «tanto el domingo como cuando vine con el Atlético Baleares me ha parecido un buen equipo, pero si no metes gol a veces crees que el partido no estuvo bien. El fútbol es resultadista».

La incorporación de José García deja al equipo sin la única ficha sub-23 que disponía, a falta de saber cuál será el futuro de Rivera. «Soy un sub-23 atípico porque llevo varios años en el mundo profesional, pero eso te hace madurar antes y ver mejor los partidos», comenta García a la salida de los vestuarios en A Seca.