El «sushi más atrevido» desafiará a los escépticos de la comida japonesa en Pontevedra

Nieves D. Amil
NIeves D. Amil PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

Javier Romero abre Sibuya «en un momento complicado, pero tenemos que hacer de las crisis, oportunidades». La cadena prevé seguir extendiéndose por Galicia

25 abr 2021 . Actualizado a las 10:09 h.

«El momento es complicado y no es el mejor para emprender, pero hay que hacer de las crisis, oportunidades», explica Javier Romero, responsable del Sibuya Urban Sushi Bar, que desde este viernes apostará por el «sushi más atrevido», ese con el que pretende convencer a los más escépticos que la comida japonesa es algo más que pescado crudo y arroz. La pandemia no le ha permitido inaugurar el local como le hubiese gustado, pero sí brindó con su equipo y porque esta apuesta gastronómica cale en Pontevedra. «Tenemos una oferta que rompe con lo que tenemos en mente, es una carta occidentalizada. No es un sushi para puristas», explica Romero, que no se define como hostelero, sino como gestor. Dirige La Pepita en Pontevedra y en Santiago y ahora da un golpe de volante para girar el globo terráqueo y aterrizar en Japón. De las hamburguesas al sushi en tiempos de pandemia. «Esperemos que cuando todo vuelva a la normalidad, estemos posicionados. Hay un estudio detrás y creemos que las propuestas que hay en Pontevedra no son acordes a la demanda», indica Romero, que aguarda que pronto se amplíe el aforo en el interior de los locales, ahora fijado en el 50 %. Antes incluso de abrir sus puertas, ya tenían reservas. Ayer apuraban los últimos retoques de un local que está ayudando a cambiar la imagen de la calle Michelena. Y eso que todavía no han puesto la terraza, para la que ya tienen solicitado el permiso. «La idea es que sean cuatro mesas para 16 comensales», añade este empresario que está tan tranquilo como motivado. 

Este local que se suma al «casual food» genera doce puestos de trabajo y aspira a que se llegue a 16 cuando esté al máximo rendimiento. «Es el peor momento para todas las propuestas, pero apostamos por el delivery», señala Javier Romero, mientras sus cocineros empiezan ya a preparar los primeros platos y los decoradores dan los últimos retoques a un local en el que predomina el color madera y el negro. ¿Por qué un japonés? Esa es una de las preguntas que más escucha Romero. Y la respuesta es muy clara: «Aquí hay un nicho de mercado, Pontevedra es tradicional y la gente joven demanda sitios diferentes, aquí no se viene solo a comer, sino a vivir una experiencia», apunta el gestor de Sibuya, que se compromete a que todos los clientes «salgan satisfechos y con las expectativas superadas».

Sibuya ya tiene dos locales en A Coruña y Lugo y continuará su expansión con otros restaurantes en Vigo y Santiago.