Llegó el covid y las cosas se pusieron feas detrás del mostrador. Marta García, cómo no, fue una de las hosteleras que luchó por visibilizar la desesperación del sector. Así, junto a otros compañeros, se marchó andando a Madrid para visibilizar esa agonía por la que estaban pasando. Igualmente, le escribió una desgarradora carta a la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, en la que le explicaba que era muy consciente del peligro del covid, que se llevó por delante a su padre, pero en la que también le pedía que no se culpabilizase a la hostelería de la pandemia. La misiva incluía una frase demoledora: ««La crisis del 2008 me llevó al paro. Este domingo el covid-19 ya se llevó a Fernando, mi padre. No permita que se lleve también mi futuro y el de las familias de mis empleados».
La pandemia fue avanzando y, malamente, las cosas se fueron recomponiendo para el sector hostelero. Marta reconoce que la situación se había reconducido y el Meigas Fora volvía a ser el negocio viable y maravilloso de antes del covid. Sin embargo, este domingo, vía Facebook, Marta anunciaba que el local estaba a punto de cerrar sus puertas. ¿Por qué? «Nosotros lo tenemos alquilado y el casero lo quería vender. Nos hizo una oferta que para nosotros era inasumible y finalmente fue vendido a otra persona. Así, se nos acaba el contrato y nos tenemos que ir».