De un campo de refugiados a inspirar a la selección australiana

QATAR 2022

Thomas Deng, Garang Kuol y Awer Mabil, antes de una comparecencia conjunta en Catar
Thomas Deng, Garang Kuol y Awer Mabil, antes de una comparecencia conjunta en Catar JOHN SIBLEY

Deng, Mabil y Kuol nacieron en campamentos a los que sus familias huyeron desde Sudán del Sur y hoy son referencias para los «aussies»

30 nov 2022 . Actualizado a las 10:04 h.

Cuando ofreció la lista de 26 futbolistas para Catar, Graham Arnold, el seleccionador de Australia, quiso reivindicar la historia de tres de sus convocados: «Son jóvenes que vienen de ninguna parte e inician un nuevo camino en sus vidas. Jugadores desconocidos que se revelan para inspirar a un país entero». Arnold se refería al central Thomas Deng, que juega en el fútbol japonés, al delantero Garang Kuol, que acaba de fichar por el Newcastle, y al extremo zurdo del Cádiz Awer Mabil.

Mabil, de 27 años, nació en el campamento para exiliados keniata de Kakuma. Hasta allí llegó su madre, embarazada de él, huyendo de la guerra que asolaba a Sudán del Sur. Su padre, al que no llegó a conocer, murió en combate. «Mis pelotas improvisadas eran bolsas de plástico que envolvíamos dentro de los calcetines», contó Mabil sobre los diez años que vivió en Kakuma, antes de que su familia viajase, en el 2006, a Australia con un visado de asentamiento en la procura de un futuro mejor.

En los suburbios de Adelaida, Mabil conoció a Thomas Deng, dos años menor, y con una historia paralela a la suya. La familia de Deng, también fugada de Sudán del Sur, pasó varios años en otro campo para refugiados keniata, ubicado en Nairobi. Su madre, junto a los cinco hijos, se mudó a territorio australiano en condición de refugiados. Thomas tenía 6 años. Su padre, médico, ya no pudo reunirse con ellos porque falleció en África. El fútbol era ya la forma de evasión para los hermanos Deng antes del éxodo a Adelaida. El mayor, Paul, llegó a ser internacional con Sudán del Sur. Peter, también mayor que Thomas, juega en el Eastern Lions de la segunda australiana.

«Para mí el fútbol fue la gran herramienta de adaptación porque es un idioma universal. Pude hacer amigos simplemente jugando e hizo que esa transición en mi vida fuera mucho más fácil para nosotros. A mi hermano y a mí nos dio un sentido de pertenencia. Cuando me fui a jugar a Melbourne, me acostumbré a dar un paseo después de los partidos. Siempre me seguían los guardias de seguridad, pensando que iba a robar. Aprendí a ignorarlos», reveló Thomas sobre sus inicios en Australia, a la que representó como capitán de su selección en los Juegos de Tokio. Thomas Deng y Awer Mabil no solo se criaron juntos en Adelaida, también debutaron de la mano con la selección aussie, en el 2018, en un amistoso contra Kuwait.

«El mayor talento desde Kewell»

Los padres de Kuol, el más joven de los tres, con 18 años, también huyeron de la guerra civil en Sudán del Sur y se instalaron en un campamento en Egipto. Allí nació Garang, en una familia con seis hermanos —Alou, otro de ellos, juega en el Stuttgart— que logró el pase como refugiada para viajar a Shepparton, al norte de Melbourne.

«Garang es el mayor talento de Australia desde Harry Kewell. Hace un año no había debutado como profesional. Ha conseguido fichar por el Newcastle sin llegar a jugar un solo partido entero. Cada 45 minutos genera un gol o una asistencia», lo describió Arnold, que se lo ha llevado al Mundial después de disputar únicamente un partido con la absoluta, ante Nueva Zelanda, en septiembre. Otro sueño cumplido tras escapar de la misma matanza.