El Murcia espera el nombre del compañero de fatigas que le acompañará a la Leb Oro. Y lo hace planificando ya el próximo ejercicio.
Mientras, el Obradoiro se encuentra al borde del precipicio. Solo un milagro puede salvarle del descenso. Y ese milagro pasa por ganar los tres partidos que restan, algo difícil de conseguir si miramos la trayectoria del equipo santiagués en la segunda vuelta, y que el Lagun Aro pierda los tres que tiene, algo que sí podría suceder, pues los guipuzcoanos también están firmando una segunda vuelta penosa.
Uno de los dos, y todo apunta a que será el Obradoiro, acompañará a la Leb Oro al Murcia, equipo que lleva casi toda la campaña ocupando el farolillo rojo y que ya hace varias semanas que confirmó su descenso. El Murcia ya empezó a planificar su futuro en la categoría inmediatamente inferior con el objetivo de retornar a la ACB.
Su director general, Alejandro Gómez, explicó que para regresar a la ACB el equipo murciano apostará por confeccionar una plantilla con hombres y no por nombres, pues sus técnicos consideran que la LEB es una competición muy compleja como para empezar a pensar que hay que quedarse con jugadores porque tienen un nombre.
El Murcia quiere empezar a tomar impulso para ir hacia arriba de forma rápida y por eso la campaña de socios irá orientada a fidelizar a la gente que siempre estuvo con el club.