Espera que los recursos de la oposición no incidan negativamente
09 jul 2014 . Actualizado a las 11:23 h.Agustín Hernández afirmó ayer que iba a convertir el Ayuntamiento compostelano en el «centro da miña vida» y que en el escenario municipal se propone pasar la mayor parte de sus horas. Y lo hace porque dice ser consciente de la «inxente tarefa» que tiene en sus manos «nunhas difíciles circunstancias» para la Administración compostelana.
Y una de sus obligaciones, señala, es superar definitivamente la crisis económica y social que padece Santiago. Su compromiso se dirige, en ese sentido, a mejorar la calidad de vida de los ciudadanos, las empresas, el comercio, el turismo, la hostelería y los diversos sectores que componen la vida de Compostela. En el escenario de precariedad hay un aspecto esencial en su nuevo programa: los servicios sociales: «Que ninguén se quede atrás nin se sinta desprotexido».
Las políticas sociales y económicas son precisamente uno de los caballos de batalla de la oposición, que cuestionó a menudo la falta de actuaciones serias en esa línea. El nuevo alcalde dispone de un año para plasmarlas en un documento. Miembros del nuevo gobierno señalan, no obstante, que en un año se pueden hacer cosas.
Los objetivos de Agustín Hernández tienen el contrapunto de los recursos de la oposición por los concejales no electos introducidos en la corporación, pero el regidor espera que no haya problemas. «Que a xustiza fale e que a responsabilidade da oposición leve a que eses plantexamentos, que son absolutamente lexítimos, non produzan ningún tipo de interferencia no normal desenvolvemento da vida cotiá dos cidadáns», indicó.
Sumarse al esfuerzo
Los nuevos ediles están dispuestos a unirse al esfuerzo de Hernández en el último tramo de mandato. La diputada compostelana Marta González aboga por que se imponga la normalidad a partir de ahora. «Os discursos do alcalde indican as súas prioridades, traballar arreo e ter en conta no só a opinión da oposición, senón tamén a da cidadanía», dice González. Por su parte, María Jesús Sainz señala que por estar en el Senado no puede atender áreas de gestión directa, por lo que su función girará en torno a la «atención ás necesidades ante as institucións».
Por su parte, María Antón explica gráficamente su acción de gobierno: «Con orgullo y responsabilidad, con pico y pala». Ramón Quiroga ve el nuevo proceso municipal en marcha. «O alcalde dixo que había que traballar pola cidade e para iso imos estar cos cometidos que nos asigne».
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