Feijoo admite que todos los días de Galicia estarán marcados por «el accidente»

Juan María Capeáns Garrido
Juan Capeáns SANTIAGO

SANTIAGO

El presidente, delegado regio en la ofrenda al Apóstol, dice que los refugiados no son una amenaza si hay un política «prudente»

25 jul 2017 . Actualizado a las 12:21 h.

El presidente de la Xunta ejerció de delegado regio por cuarta ocasión en la tradicional ofrenda al Apóstol Santiago que se celebró esta mañana en la Catedral de Santiago. En sus peticiones al patrón, Alberto Núñez Feijoo admitió que todos los días de Galicia se quedarán marcados por «el accidente», en referencia al siniestro del Alvia del que ayer se han cumplido cuatro años en medio de un intenso debate social y político. También citó a las víctimas del terrorismo, como Ignacio Echeverría, gallego fallecido en Londres, o a Miguel Ángel Blanco, reciente Medalla de Galicia, al igual  que Aníbal Cavaco Silva y José Manuel Romay Beccaría, ambos presentes en el acto.

Feijoo, que volvió a hacer referencia a la unidad de España, aseguró que aunque Europa sea un objetivo del terrorismo no puede caer ante el «pesimismo» y pidió generosidad con los refugiados, que «no son una amenaza con una política prudente», y también llamó a afrontar los problemas del lado de la ley y la democracia. Además, se acordó de las víctimas de la violencia de género, que «no están solas» ante unos hechos que «avergüenzan a la sociedad».

El jefe del Ejecutivo gallego, que estuvo arropado por altos cargos de la Administración  y por la presidente del Congreso, justificó su presencia en un acto «tradicional» para no traicionar la historia de Galicia, que a su juicio debe aprovechar el protagonismo que le otorga el fenómeno jacobeo.

El arzobispo de Santiago respondió al oferente y, además de los mensajes religiosos, también recordó la «sombra de dor» que extendió el accidente ferroviario de Santiago y a las víctimas de la violencia, y por ello pidió al Apóstol que interceda por los que gobernantes que velan «polo ben común». En clave social, Julián Barrio aseguró que Occidente tiene un legado «bueno» y que Europa ofrece elementos comunes para construir una comunidad con un legado «bueno» dentro de una «pluralidad compleja».