Más de 70 concellos respaldan la campaña Compostela en Negro

La Voz SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

Zelia Zambrano

Los representantes municipales abogan por trabajar «en rede» para erradicar la violencia contra las mujeres

16 nov 2017 . Actualizado a las 14:24 h.

Tres diputaciones y 75 ayuntamientos de Galicia se dieron cita ayer en Compostela para denunciar la lacra de las violencias machistas y reclamar la igualdad de las mujeres. La campaña que comenzó con 17 concellos se ha ido extendiendo porque, como apuntó algún participante en la reunión de ayer, muchas administraciones locales han querido hacer suya esa causa en un momento marcado por datos que, alertaron, son «espeluznantes».

Muchos oradores consideraron que la sensibilidad ante la violencia de que son víctimas las mujeres debe primar por encima de todo, y de hecho los ayuntamientos que se reunieron en Raxoi pertenecen a todos los colores políticos. Todos ellos firmaron un convenio para expandir la campaña de concienciación contra la violencias machistas.

El acto estuvo introducido por la concejala Marta Lois, de cuyo departamento partió la iniciativa Compostela en Negro, que luego se ampliaría a la comunidad gallega con la participación de grandes empresas, establecimientos comerciales, la Iglesia, instituciones y administraciones.

El color negro se ha adueñado de muchos balcones, ventanas o vitrinas de la ciudad para denunciar una situación que los participantes en la campaña quieren desterrar. En algunos municipios grupos de mariscadores salieron a faenar con símbolos negros.

Una decena de oradores, en representación de sus compañeros, fueron desgranando en un abarrotado salón Noble de Raxoi sus impresiones sobre la campaña «contra as violencias machistas». La representante de la Diputación de Lugo, Sonsoles López, se mostró «orgullosa» de liderar la iniciativa en esa provincia. Destacó que el problema traspasa las fronteras y finalizó su intervención con un «basta xa».

Goretti Sanmartín, vicepresidenta de la Diputación coruñesa, declaró que la situación es de «emerxencia», y puso de relieve la alta participación de los municipios de la provincia (36).

El regidor de Manzaneda, Félix Domínguez, refirió que el feminismo es una manera distinta de ver el mundo y de vivirlo. «Que el patriarcado retroceda dunha vez por todas», pidió.

María Xosé Alfonso, alcaldesa de Muros, reclamó una mayor autoestima a las mujeres frente al machismo y la mayor implicación de la sociedad en el problema. Su homónima sarriana, María del Pilar López, señaló la necesidad de «traballar en rede» en pro de la igualdad de las mujeres. Y la regidora de Tomiño, Sandra González, relató el caso de una mujer en su municipio que acabó bien, aunque los periódicos están llenos de muchos otros que acabaron mal.

Xosé Manuel Pazos, alcalde de Cangas, subrayó la alta participación de municipios. Su homóloga de Lugo, Lara Méndez, reivindicó el «feminismo con maiúsculas». Y el alcalde anfitrión, Martiño Noriega, hizo hincapié en la situación estructural de violencia machista, que calificó como «unha cuestión de Estado».