El gobierno local autoriza cuatro pisos turísticos en A Raíña después de prohibir más alojamientos en el casco viejo

La Voz SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

SANDRA ALONSO

La petición de licencia fue anterior incluso a la moratoria que vetaba nuevos usos hoteleros en esa zona

20 ene 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Dos meses después de aprobar de forma definitiva la modificación del Plan Especial del casco histórico que prohíbe la instalación de nuevos alojamientos turísticos en su almendra, el Ayuntamiento ha concedido licencia de rehabilitación para la edificación de cuatro apartamentos turísticos nada menos que en A Raíña. Fue una de las tres licencias que dictaminó de forma favorable la Xunta de Goberno de este viernes.

El visto bueno municipal no contraviene, sin embargo, el acuerdo plenario de mediados de noviembre con el que Compostela Aberta ratificaba el veto que estaba en vigor con una moratoria aprobada dos años antes. Porque esa petición de licencia era anterior a la moratoria. Tanto que, según reconocía el propio alcalde al dar cuenta de la aceptación de esa solicitud, tivo «unha longa tramitación, de case catro anos». La demanda de esa autorización, para el número 9 de dicha calle, es de principios del 2015. Y la aprobación definitiva se sancionaba todavía anteayer, «logo de moitas correccións», justificaba Martiño Noriega.

Pese a la moratoria y a la tramitación de la modificación del Plan Especial que consolida la prohibición de la instalación de nuevos alojamientos turísticos en la almendra del casco viejo en tanto no se revise el planeamiento de ese ámbito de la ciudad, el Concello tenía que tramitar las solicitudes que se hubiesen formulado antes de implantarse el veto. Y ese ha sido el caso, pese a la demora en su resolución.

Compostela Aberta sacó adelante en noviembre la prohibición de nuevas instalaciones de alojamiento turístico con el único apoyo del BNG, la abstención del PSOE y el voto contrario del PP, aunque si en algo coincidió toda la oposición fue en su crítica ante la ausencia de alternativas en ese texto para los propietarios de alojamientos de carácter familiar que aun careciendo de licencia municipal estaban dados de alta con anterioridad en el catálogo de viviendas de uso turístico de la Xunta.

La oposición, como la asociación que agrupa a este tipo de alojamientos, Aviturga, demandaban una solución provisional para ellos en tanto no se resolviese jurídicamente el debate que abrió la creación de la figura de los pisos turísticos en el 2017. CA insistió en que estos requerían autorización municipal, al igual que cualquier otra actividad. Aviturga ya anunció que recurrirá.