Vidorreta y doce más en Tenerife, sin Pablo Aguilar

SANTIAGO

Emilio Cobos

El ala pivot granadino se desvincula del club insular

09 oct 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

El Monbus Obradoiro se va a encontrar en el Santiago Martín un equipo totalmente renovado. Hasta tal punto que cuestiona aquel axioma que dice que es más fácil sustituir al entrenador que a la plantilla. En Tenerife sigue Txus Vidorreta y cambiaron de aires todos sus discípulos excepto uno, Tomas Gielo, que se pasó la pasada campaña en blanco por una grave lesión de rodilla.

Entre los fichados para este curso no ha llegado a debutar el pívot internacional Pablo Aguilar, que ayer llegó a un acuerdo con el club para desvincularse. En verano pasó por el quirófano por una lesión en la mano izquierda. La recuperación no se está ajustando a los plazos previstos inicialmente. El propio jugador comentaba a través de las redes sociales esta circunstancia: «No me encuentro como me gustaría. No estoy ni cerca del 100 % para poder ayudar al equipo en todo lo que podría y me gustaría».

La posibilidad de que Pablo Aguilar no se recuperase en los plazos estimados llevó en su momento al conjunto isleño a incorporar a Álex Suárez con un contrato temporal ampliable. Es un ala pívot de un perfil similar al del granadino. Y con él son doce los integrantes de la primera plantilla que están a las órdenes de Txus Vidorreta. Entre esos doce figuran dos jugadores con pasado en el Monbus Obradoiro: Santi Yusta y Kyle Singler. Este último se perdió los dos primeros partidos de la Liga Endesa por un esguince y debutó en competición oficial con el Tenerife el fin de semana ante el Real Madrid.

De los doce, el único que debuta en la ACB es el ala pívot Darion Atkins, un buen complemento para el gigante georgiano Shermadini en la pintura. El techo del Tenerife advierte de que el Obradoiro es un equipo «que juega diferente», capaz de manejar diferentes ritmos en ataque. Prevé que la defensa será clave el sábado, sobre todo a la hora de intentar frenar a los lanzadores del cuadro santiagués. El pívot tiene claro el objetivo: ofrecer a su afición la primera victoria de la temporada en casa.