El covid rebaja en medio millón de euros la previsión de ingresos de grúa y ORA

r. martínez SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

Sandra Alonso

La suspensión temporal del cobro y la menor movilidad lastrarán sus cuentas

30 sep 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Los efectos económicos de la pandemia están poniendo en jaque a los sectores más vinculados con el ocio y el turismo, actividades sin duda destacadas en una ciudad de servicios, administrativa, universitaria y turística. Pero también se están dejando notar en las cuentas de aquellos servicios públicos cuyas prestaciones están directamente vinculadas con la movilidad ciudadana. Es el caso del transporte urbano, al que le está costando recuperarse del fuerte retraimiento de la demanda, y el de la ORA

Esta última está en parámetros más próximos a la normalidad, aunque no alcanza todavía los valores previos al covid. El repliegue de la movilidad personal está notándose también en sus cuentas, y en las de la grúa, hasta el punto de que, de mantenerse la dinámica actual, el Concello tendrá que afrontar a finales de año la caída de más de medio millón de euros en ingresos sobre lo previsto para el 2020. Y el problema ya no está tanto en que se pierdan expectativas de ingresos, sino en que Raxoi tendrá que hacer frente a ese medio millón largo de euros con sus propios fondos, porque tiene que asumir el coste de ambos servicios.

Una caída del 35 %

La caída conjunta de la grúa y la ORA rondará el 35 %, aunque será más abultada en el segundo caso: en términos absolutos, porque porcentualmente la actividad de la grúa se resiente más. Aunque ambos servicios se gestionan conjuntamente, se mueven en parámetros económicos muy dispares. La previsión con que arrancó el 2020 para la ORA apuntaba a casi 1,37 millones de euros de ingresos, por 286.000 de la grúa. Eran, en total, 1.654.000 euros, cifra que la nueva proyección económica deja más próxima al millón.

El descenso de la movilidad ciudadana en los últimos meses también les afecta

La suspensión del cobro en las zonas de aparcamiento regulado durante el confinamiento y en la primera fase de la desescalada está detrás de esa revisión de resultados para final de año, pero también el descenso de la movilidad ciudadana en los últimos meses. Aunque en agosto la ORA ya rondaba el 90 % del nivel de actividad previo al covid, la caída de la demanda por las tardes en las zonas menos céntricas es perceptible. El arranque del curso podría elevarla, aunque, por otro lado, las restricciones que condicionan el ocio siguen afectándole. En cualquier caso, las nuevas previsiones que se manejan para la ORA al término del año dejarán sus ingresos en unos 950.000 euros.

Los de la grúa quedarían en torno a los 165.000. Su actividad no depende de demanda externa, como la ORA, pero los meses de confinamiento, la posterior minoración de movimientos y el teletrabajo le han restado posibilidades de intervención desde marzo.

Los vehículos retirados de la vía pública subieron un 13 % en el 2019

El Ayuntamiento tendrá que asumir esa merma de ingresos y cubrir además, hasta donde sea necesario, los costes del servicio. Si bien este mejoró en el 2019 los resultados del 2018, los ingresos propios no garantizan de momento el equilibrio financiero, aunque no le andarían lejos. Los presupuestos de Tussa preveían 1,8 millones de coste del servicio en el 2019, incluyendo la gestión del depósito de vehículos, aunque finalmente fue algo menos.

Las cuentas del 2019 arrojan ingresos de casi 1.274.000 euros por la ORA, apenas 12.500 más que en el 2018, aunque el segundo semestre evidencia una progresión al alza que no se observa en el primero, cuando Tussa no había cumplido todavía un año al frente del servicio, municipalizado en junio del 2018. También es cierto que en la segunda mitad del año gestionó más plazas (más de 1.770) por la incorporación de las áreas de Conxo y Pontepedriña. Hasta entonces, aunque con fluctuaciones por las obras de Patio de Madres, no llegaban a las 1.600.

Mejor fue el comportamiento de la grúa. Según la memoria del pasado año, aprobada recientemente, mejoró en casi 40.000 euros el resultado del 2018. Retiró de las vías públicas 4.276 vehículos, que depararon al Concello 289.280 euros de ingresos. Son un 13 % más de coches y un 15 % a mayores de ingresos, aunque el covid romperá este año la línea ascendente. En cualquier caso, la grúa no trabaja lo que hace años. Ahora está en torno a la mitad que hace una década. Parece que los compostelanos infringen menos: las reurbanizaciones de los últimos años también les han dejado menos ocasiones de hacerlo.