Padres de Negreira critican una inclusión escolar «irreal» por optimizar recursos
NEGREIRA
Seis familias ejercen de cuidadoras en un colegio ante la falta de personal especializado
15 sep 2019 . Actualizado a las 05:05 h.La educación inclusiva es un derecho que ampara a las seis familias de Negreira con hijos con atención especial, bien sea permanente o de forma puntual, durante el tiempo que permanecen en el colegio O Coto. Una sola cuidadora tuvo que hacerse cargo de atender a cinco escolares -el sexto aún no se ha incorporado al centro, pero sí está matriculado-, con la ayuda de profesores de apoyo y de los padres, que solo el primer día tuvieron que cambiar varias veces a su hija de primer curso, al igual que a un niño de quinto de infantil, o ser la tutora quien se haga cargo de atender a un escolar durante el recreo y no poder atender otras necesidades del centro. Así lo recoge el informe del departamento de Orientación que informó que el alumnado con necesidades especiales no estará atendido de forma completa hasta que el próximo martes llegue una segunda cuidadora, que para las familias y la asociación de padres siguen siendo insuficientes ante lo que tachan de integración escolar «irreal» en el colegio.
A finales del curso pasado y a la vista de la escasez de cuidadoras, pues solo tenían una profesional para tres alumnos y una segunda solo en momentos puntuales, como para las excursiones, los padres solicitaron al centro que comunicase a Educación la imperiosa necesidad de incorporar más cuidadoras. Y el centro lo hizo, a la vista de las matrículas con cuatro niños con atención permanente y dos puntual. La consellería ni siquiera les contestó hasta que la primera semana de septiembre solicitaron información al respeto.
Las familias invitaron a los responsables de Educación a visitar el centro y comprobar in situ las necesidades. Declinaron el convite, aun solidarizándose con ellos, según los padres. «Ao primeiro escrito enviado o día 5 nin tiveron a decencia de contestar», señalan, y advierten que hay niños con incontinencia permanente que no pueden esperar a ir al baño, o que no los puedan dejar solos en el patio. «A maioría deben ir ao baño cada hora e media, e estando en distintas aulas faise moi difícil para a coidadora atendelos a todos», afirma una madre. Otra señala que su hijo está en un programa para no cambiarle el pañal, por lo que una vez en el baño, la cuidadora debe aguardar a que termine. Y la merienda se la tienen que dar a tres niños a la vez. La problemática se recrudece en las salidas del centro, llegando al punto de desplazarse cuidadoras de otros colegios.
«Remitimos un escrito no que lamentamos unha situación inxusta e vergoñenta»
Los padres no están solos en su reclamación para que se refuerce el servicio de cuidadoras, al menos con una tercera persona más, aunque dejan claro que el propio colegio solicitó cuatro. La Asociación de Nais e Pais Val de Barcala los apoya: «Remitimos un escrito lamentando unha situación inxusta e vergoñenta para que de maneira urxente os nenos estean atendidos polas catro coidadoras que o centro demanda para a súa atención», afirman.
Desde Educación les han dicho que harán una nueva valoración tras la incorporación de la segunda cuidadora en la semana entrante. Tampoco entienden que para enviar una persona pasen cinco días y, desde el Concello de Negreira, remitirán un escrito a la consellería solicitándole que adopten las medidas que marca la ley. El Partido Popular de Negreira también demandó a Educación el refuerzo del servicio con al menos una tercera cuidadora.