Santiago adquirirá la obra de Maside para que sea patrimonio de Galicia
SANTIAGO CIUDAD
El Concello barajó como sede la Casa da Parra, aunque ve improbable su cesión
12 dic 2017 . Actualizado a las 12:46 h.La ciudad alojará, seguramente como patrimonio público, una colección notable de obras pictóricas del artista Carlos Maside, muy vinculado durante su existencia a la capital gallega. Se trata de una serie de piezas que en su día estuvieron en Vigo y de una colección de retratos del pintor nacido en Pontecesures.
A cargo de la operación para hacerse con la obra de Maside están el propio alcalde de Santiago, Martiño Noriega, y la vicepresidenta de la Diputación de A Coruña, Goretti Sanmartín. Ambos llevan meses trabajando en esta iniciativa (en la que también se involucró en una primera fase Branca Novoneyra) y su deseo es culminarla antes de que acabe este año, para disponer la tarea museística en el 2018.
Los dos objetivos que se pretenden lograr son la adquisición de las piezas, previo acuerdo sobre el precio con la familia depositaria de las mismas, y la ubicación de la obra de Maside. Aunque también se quiere conseguir la implicación institucional en el proyecto de la Xunta de Galicia, dada la importancia que supone para la ciudad y para la propia comunidad autónoma tener bajo custodia y a disposición del público la obra del eximio pintor.
Con ese propósito, Diputación y Concello han contactado con la Consellería de Cultura, que no ha explicitado aún su participación, pero que tampoco ha dicho que no a la iniciativa. De lo que se trata es de «prorratear» administrativamente la adquisición del legado del pintor, según indicó el alcalde Martiño Noriega. El Consorcio no está inmerso en esta actuación, pero el regidor no descarta que pudiera participar si lo cree oportuno.
Los promotores del proyecto siguen buscando una ubicación adecuada, que podría ser incluso en un inmueble compartido del casco histórico. Por ahora no está cerrado. Una de las opciones que sondeó Noriega fue la Casa da Parra, pero las características de la actividad de la sala y el anuncio de la Xunta de dejarla cortaron esa posibilidad. Aunque no descarta insistir en una cesión por parte del Gobierno central (como titular del recinto), Noriega lo ve muy complicado.
El alcalde destaca la labor gestora y el empeño de Goretti Sanmartín por alcanzar el objetivo. La vicepresidenta de la Diputación lleva tiempo reuniéndose con la familia del pintor de cara a acordar la tasación de los cuadros. Es una cuestión que, por prudencia, no se quiere hacer pública. Eso sí, el deseo de los familiares es, por encima de todo, que la obra esté bien salvaguardada.
La custodia, determinante
Y eso tiene su historia, puesto que una de las razones por las que han traído a Santiago los cuadros que se albergaban en unas dependencias de Vigo obedecen a la deficiencia de la custodia de las 21 piezas allí depositadas. La colección salió de la ciudad olívica en el año 2012, pero no sin polémica y tras haber desfilado el caso por los tribunales.
El Ayuntamiento de Vigo custodiaba las piezas desde el año 1968 en virtud de un convenio suscrito en aquel entonces por el alcalde Rafael Portanet y el pintor. Una de las cláusulas obligaba a restituir el legado de Maside en caso de que lo dispusieran sus herederos, como así ocurrió al no haber llegado a buen puerto las gestiones de estos con el Concello de Vigo.
Esto dio pie al enfado del alcalde vigués, Abel Caballero, y al litigio judicial que se saldó de forma favorable para la familia. Los cuadros partieron hacia Pontevedra y, finalmente, recalaron en Compostela.
El Ayuntamiento tiene previsto incorporar en cesión el legado de Kukas
El Ayuntamiento compostelano también tiene el objetivo de preservar el legado de Monicreques de Kukas. En ese caso, el pleno de la corporación aprobó en su día una propuesta del BNG para la cesión, musealización, exposición y difusión de la obra de la compañía, la primera y más antigua de teatro contemporáneo de marionetas de Galicia, pues su gestación data del año 1979.
La asignatura pendiente para el cumplimiento de este compromiso plenario es hallar el local que albergue este legado. La labor de Monicreques ha consagrado universalmente el teatro de títeres compostelano.
Ese legado está compuesto por títeres, cabezudos, gigantes, atrezos, escenografías, manuscritos de obras teatrales, figurines, carteles originales, fotografías, vídeos y más de treinta instalaciones de escenas completas de obras teatrales. Es un patrimonio que el Concello estima que hay que salvaguardar y dar a conocer al público especializado, ciudadanos, visitantes y pequeños. Es una expresión social que va «máis alá da arte e o entretemento», según ensalza Raxoi.