Setex confirma que ha recurrido a la vía judicial para reclamar los parquímetros

La Voz SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

xoan a. soler

Noriega dijo desconocer que la empresa mantuviese algún conflicto judicial con Raxoi

12 ene 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Martiño Noriega decía el jueves desconocer que Setex Aparki, la anterior adjudicataria de la ORA y la grúa, mantuviese algún conflicto judicial con el Ayuntamiento por la liquidación del contrato que la desvinculó de la gestión de ambos servicios para que la asumiese la empresa municipal de transportes. Pero sí lo mantiene. Así lo confirma la empresa. Y no es cosa de hace unos días. De hecho, la demanda de Setex ha sido admitida y está en período de pruebas, con lo que el Ayuntamiento es conocedor de que se enfrenta también en los tribunales a una reclamación bastante más elevada incluso que la de Doal. Solo por el coste de tasas no abonadas de retirada de coches, estadías de larga duración no cobradas y liquidaciones anuladas, la anterior concesionaria calcula que el Concello le adeuda 1,2 millones de euros.

Así lo recogía en sus alegaciones contra la liquidación, en las que también reclamaba la titularidad de los 120 parquímetros que había incorporado al servicio y que el Concello se quedó en el traspaso de la gestión a Tussa. Pero Raxoi no admitió ni una ni otra, con lo que la reclamación acabó en vía judicial. El coste de los parquímetros alcanzaba prácticamente el millón de euros cuando Setex se hizo de nuevo con la concesión de la grúa y la ORA en el 2012, y en esa cantidad cifraba ayer Rubén Cela el importe que reclama esa firma. Lo hacía al advertir que todavía puede haber más sentencias indemnizatorias por la ORA. El edil nacionalista sitúa el valor actual de los parquímetros, no obstante, en torno a medio millón de euros, por la depreciación del uso. Así lo apuntaba un informe municipal al que hizo referencia.

Las mismas pretensiones

Setex mantiene ante los tribunales las mismas pretensiones que ya anunciaba en esas alegaciones. Porque, sostiene, en su plica quedaba claro que la oferta de los parquímetros no estaba entre los elementos que se incorporarían a los bienes municipales una vez que concluyese la concesión, como fue el caso de las cinco grúas para la retirada de vehículos y dos furgonetas para servicio de la ORA, a cuyo traspaso no puso reparo alguno. Y según el entonces vicesecretario municipal, ahora secretario, la propiedad de los parquímetros debía corresponder a Setex.

Así lo estimaba en un informe datado en mayo del 2017, aunque el director de la asesoría jurídica municipal era de otra opinión. Entendía que deberían ser objeto de «reversión gratuíta» al Concello como parte de los bienes de instalaciones adscritas a los servicios públicos de la ORA y la grúa, aunque no fue sobre esa posibilidad en la que finalmente fundamentó su conclusión de que el Ayuntamiento tenía derecho a quedarse con las máquinas expendedoras, sino por entender que Setex debería indemnizar a la Administración municipal. «Esa reversión non deriva da existencia dunha concesión válida, senón da liquidación dun contrato nulo con suxeición aos principios xerais de dereito sinalados nas consideracións anteriores, e como consecuencia da obrigación de Setex de indemnizarlle á Corporación os danos e perdas que esta sufrise», apuntaba en un informe de agosto del 2016. Una «pretendida compensación de daños y perjuicios que no sabemos de dónde vienen», decía en junio del 2018 el presidente de Setex, Jaime López de Aguilar. La grúa y la ORA pasarían a manos de Tussa apenas dos semanas después.

Pendientes de resolución judicial siguen también otras reclamaciones económicas, aunque en este caso por parte del Concello hacia la propia empresa, que litiga contra ellas. En la liquidación del contrato el gobierno de Noriega le reclamaba a Setex 630.679 euros, que quedarían en prácticamente 473.000 al descontarle lo que la firma ya le había abonado como canon entre el 2014 y el 2016.

El alcalde señala que la denuncia de Doal habría llegado aunque no hubiese municipalización

Martiño Noriega insistió ayer en que la denuncia presentada por la empresa Doal por no haber recibido la adjudicación de la ORA y la grúa se habría producido aunque el Concello hubiese decidido mantener el sistema de gestión indirecta del servicio de regulación de aparcamiento en la vía pública.

El regidor señaló que el informe encargado por el Concello de Santiago al entonces secretario municipal, Javier Castiñeiras, establecía que, ante la retirada de la concesión a Setex, las soluciones jurídicas planteadas eran la convocatoria de un nuevo proceso de adjudicación del servicio o el cambio de modelo del mismo para promover la gestión directa. Ninguna de ellas, recalcó Noriega, era que otra de las empresas del citado proceso, Doal en este caso, fuese la adjudicataria del servicio. En ese contexto, el regidor señaló que la opción política adoptada por Compostela Aberta fue asumir la gestión.

«Non vou convencer a quen non quere ser convencido. Os feitos están aí e cada un merca o discurso que quere mercar», señaló el regidor sobre este polémico asunto, del que también resaltó que si en el año 2011, con la adjudicación de la ORA, se hubiese atendido la advertencia técnica sobre el contrato o posteriormente se hubiese hecho un seguimiento de la misma, esta situación no se habría producido.