Jael sopla las velas de sus 25 años rodeado de amigos

La Voz

SANTIAGO CIUDAD

Sandra Alonso

José María Fernández reunió a 650 invitados en la celebración en el Pazo de San Lourenzo

16 sep 2019 . Actualizado a las 00:11 h.

Cuando hace 25 años José María Fernández (Chema) abría la puerta de su joyería Jael en la calle Xeneral Pardiñas, de Santiago, iniciaba una vida profesional que «ha estado cargada de buenos y malos momentos». Hace cinco años amplió su firma con la apertura de otra joyería, del mismo nombre, en la ciudad de A Coruña. Echando la vista atrás, Chema hace balance y se muestra seguro de que «en la balanza hay más cosas buenas que malas». La pasada noche, José María citó a sus clientes, «a los que considero más amigos que clientes», para festejar las bodas de plata de Jael, en el Pazo de San Lourenzo. Con un ambiente cargado de emociones, las sorpresas se sucedieron a lo largo de una velada «a la que quise invitar a personas, amigos, no a instituciones, porque quería dar las gracias a todos los que han hecho posibles estos 25 años», comentó el joyero. El marco escogido para el cóctel-cena fueron los jardines del pazo, donde un trío de música clásica puso la nota de distinción en la primera parte de la fiesta. Con la noche avanzada, el grupo Nuevo Plan interpretó música de los años 80, reconocida y bailada por muchos de los asistentes. Durante la celebración, José María tuvo la oportunidad de saludar y conversar con numerosos amigos, que han estado vinculados a la joyería en algún momento de sus vidas. Entre los 650 invitados se encontraban el alcalde de Santiago, Xosé Antonio Sánchez Bugallo; la teniente de alcalde Mercedes Rosón; Roberto Pereira y Mariano Gómez-Ulla (presidentes del Club Financiero de Santiago y de A Coruña, respectivamente); la gimnasta olímpica Carolina Rodríguez; el actor Antonio Garrido; y el entrenador del Obradoiro, Moncho Fernández. Tampoco quisieron perderse esta celebración de los 25 años directivos de las marcas que representa Jael: Cédric Müller (Rolex), Rubén Piepers (Tudor), Blanca Panzano (Tag Heuer); Joaquín Otero (Bulgari), Amelia Briones (Richemont) y Jean Claude Morgeli (Hublot). José María Fernández considera que el éxito de su joyería se asienta «en el trato personal que damos a todos los que cruzan la puerta» y, aunque durante estos 25 años hemos tenido que superar una fuerte crisis económica, el esfuerzo de toda la familia que formamos Jael consiguió mantener a flote y en alza el proyecto». Lejos de la idea de que Santiago no atrae turismo de calidad y de que el Ensanche no recibe a miles de visitantes, Chema considera que su joyería es el vivo ejemplo de que estas afirmaciones no son totalmente ciertas. «Si se ofrece buen trato y calidad, repiten. Hay quien dice que da igual como se trate a un turista, porque no volverá, pero eso no es así. Vuelve si se le trata bien». Entre los clientes que cruzan las puertas de su establecimiento en la rúa Xeneral Pardiñas hay turistas extranjeros, de fuera de la Unión Europea, que optan por comprar en Santiago, porque se ahorrarán el 21 % del IVA. «Esto es ya un buen motivo para atraer a este público», apuntó. Coincidiendo con este aniversario, Chema nos reveló el origen del nombre de su joyería, y, como suele ser habitual, fue producto de la casualidad. «En una comida familiar, cuando pensábamos en un nombre atractivo para la joyería, en la conversación surgió la idea de utilizar el origen celta del nombre de Galicia». Casi sin querer de Galicia salió la palabra Gael, y «cambiar la G por J era casi obligatorio», comentó. Y Jael, por 25 años ya, y a seguir sumando.