#Hemeroteca I Año 1986 I El bus urbano sube y provoca las quejas de sus usuarios

La Voz

SANTIAGO CIUDAD

PACO RODRIGUEZ

Los ciudadanos protestaron por la escasez de frecuencias, la obligación de ir apiñados y el incumplimiento de horarios

21 ene 2020 . Actualizado a las 04:55 h.

Las quejas por el servicio del bus urbano en Santiago vienen de lejos. En enero de 1986 los usuarios tuvieron que hacer frente a una de las habituales subidas que llegan -y ya llegaban entonces- con el nuevo año, ocasión que aprovecharon para dar a conocer su malestar por las frecuencias en los barrios más apartados del centro y las quejas de los vecinos del rural que, entonces, tenían que hacer uso del coche de línea para acercarse a la ciudad. El billete, IVA incluido, se había colocado en las 36 pesetas, y la necesidad de rebuscar monedas en los bolsillos dio pie a que los vecinos de O Castiñeiro y de San Pedro, de Vite o de Conxo, se quejasen por la falta de frecuencias, la obligación de ir «apiñados» o los incumplimientos en los horarios. A las denuncias de los vecinos de la ciudad se sumaron también los del rural, que como decía entonces La Voz de Galicia, «pertenecen al municipio santiagués como el que más» y sin embargo tenían que coger el coche de línea para acercarse al centro.