Estos dos hosteleros asumen el reto de emprender en plena pandemia

Patricia Calveiro Iglesias
Patricia Calveiro SANTIAGO / LA VOZ

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CEDIDA

Durante el confinamiento idearon un nuevo concepto de pizzería, Iccónnica, que abrió sus puertas en Lugo y ahora lo hará en Santiago

22 oct 2020 . Actualizado a las 14:30 h.

¿Qué empresario, en su sano juicio, dedicaría los meses de confinamiento a planear la apertura inminente de dos nuevos negocios? Pues solo uno que esté muy seguro de sí mismo, de su proyecto y que tenga muchas ganas de enfrentarse a retos mayúsculos. Eso es precisamente lo que motivó a Juana Eiroa a su socio, Óscar Gómez Martínez, a abrir una pizzería muy poco convencional, Iccónnicca. Primero, en tierras lucenses. Y, una vez pasado el San Froilán, en Santiago; donde están terminando de acondicionar el local de San Pedro de Mezonzo (en el que estuvo antes el Tele Sushi) para la inauguración, prevista para el 27 de noviembre. «Somos un grupito que lleva 25 años en la restauración y en este tiempo nos hemos ganado una reputación. Tenemos la brasería Canedo y el restaurante Il Farabutto, en las instalaciones del Club Fluvial. Hace tiempo que teníamos idea de montar algo así. Era algo que estaba ahí aparcado y, cuando nos encerraron el 13 de marzo, empezamos a trabajar en ello. En esos tres meses hubo mucho que hacer», cuenta Juana. «Los otros establecimientos que tenemos en Lugo son presenciales y vimos enseguida que el servicio de take away y delivery era el futuro. La pandemia nos llevó a eso», añade esta diseñadora gráfica reconvertida en chef. Esa es una de las características de Iccónnicca, que no tiene mesas para comer allí. «Es un concepto distinto de pizzería. No competimos con las grandes, ni por asomo. La propuesta es distinta y lo que hacemos es trasladar la experiencia que tenemos a la pizza, en este caso con un formato y unas recetas muy diferentes a lo habitual. Aunque hay alguna más al uso, en Iccónnicca experimentamos con los productos para ofrecer cosas siempre nuevas», destaca.

De entrada, sus pizzas no son redondas sino cuadradas y de tamaño pequeño, porque la filosofía es que el cliente elija, combine y pruebe distintas variedades. La paleta de ingredientes va desde el pistacho hasta el mejillón, ajo negro, sardina ahumada, cachelos o pera. Para su inauguración, lanzaron un menú degustación de 12 pizzas y en la capital gallega seguirán la misma fórmula. «Tenemos el obrador en Lugo, donde hacemos la masa y todo lo demás nosotros mismos; y a partir del próximo mes lo distribuiremos también en Santiago», apunta Juana. ¿Por qué se decantaron por esta ciudad y no cualquier otra para expandirse? «Elegimos la peor plaza para torear. Queríamos validar la idea de negocio y ponernos a prueba en un contexto más arriesgado, porque en Santiago partimos de cero y es una ciudad con mucha población flotante», responde. El tiempo dirá si su fórmula para pizzaexplorers acaba cuajando.

PACO RODRÍGUEZ

Con el foco en el género

Seis mujeres y un hombre fueron ayer distinguidos en el Colexio de Fonseca por abrir camino en la investigación y la docencia desde la perspectiva de género. Teresa Moure, profesora de Filoloxía, recibió el primer premio en la undécima edición del certamen de la USC por una iniciativa puesta en marcha en una de sus asignaturas, Com A de lingüistA. Y la santiaguesa Julia Ammerman obtuvo el máximo galardón entre los investigadores tras estudiar los sesgos de género en el derecho a la propia imagen. Los proyectos docentes de María Pilar Freire Esparís y Francisco Xosé Candia recibieron el segundo y tercer premio; así como el trabajo realizado por María del Carmen Míguez y M. Belén Vázquez sobre la depresión y ansiedad en el embarazo, y el de Montserrat Pena en cuanto a los feminismos en la literatura juvenil e infantil gallega.

Sandra Alonso

Reliquias y peregrinación

El científico del CSIC Antón M. Pazos presentó en Santiago su libro Relics, Shrines and Pilgrimages, donde analiza el papel de las reliquias en la evolución de las peregrinaciones. El autor estuvo acompañado por la directora de Turismo de Galicia, Nava Castro, y el del instituto Padre Sarmiento, Eduardo Pardo de Guevara.