Condenado un hombre en Santiago a 11 años de cárcel por violar, maltratar y obligar a mendigar a su hija

Xurxo Melchor
Xurxo Melchor SANTIAGO

SANTIAGO CIUDAD

La sección sexta de la Audiencia Provincial de A Coruña, con sede en Santiago, acogerá la sesión.
La sección sexta de la Audiencia Provincial de A Coruña, con sede en Santiago, acogerá la sesión. XOÁN A. SOLER

Abusó de la chica amenazándole con suicidarse si no mantenía relaciones sexuales con él

31 mar 2023 . Actualizado a las 00:59 h.

Si los delitos sexuales son siempre repugnantes y merecen el mayor de los reproches y las penas más severas, cuando el agresor es además el padre de la víctima y también la maltrataba de forma habitual y le obligaba a mendigar la dureza de la condena está más que justificada. Un caso así fue juzgado por la Audiencia Provincial en Santiago y el tribunal ha dictado una sentencia que suma once años y tres meses de cárcel para el hombre. Ocho y medio por abuso sexual con penetración, dos por violencia habitual y nueve meses por utilización de menor de edad para la mendicidad. La madre, que también fue acusada de los dos últimos delitos, tendrá que cumplir dos años y nueve meses de prisión.

Los malos tratos se producían en el domicilio habitual de la familia, de nacionalidad rumana, y tanto ella como sus hermanas los sufrieron desde bien pequeñas. Consistían en «bofetadas, tirones de pelo o empujones llegando su madre a golpearlas con una escoba o con una zapatilla y su padre con el cinturón», relatan los hechos probados de la resolución judicial, contra la que cabe recurso de apelación ante el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG).

El que la obligaran a mendigar llegó más tarde, cuando en septiembre del 2017 la chica dejó de estudiar. Fue entonces cuando comenzaron a trasladarla habitualmente en coche y la dejaban a las puertas de distintos supermercados de los que la recogían por la noche. Esta situación se prolongó hasta que la víctima alcanzó la mayoría de edad, pero lo más grave llegó en junio del 2018, cuando el acusado «le dijo de forma insistente y repetida» a su hija, que aún era menor de edad, «que quería mantener relaciones sexuales con ella, expresándole que si ella no accedía, él se suicidaría», recoge la sentencia.

La víctima no quería acceder a las pretensiones sexuales de su padre, pero se vio forzada a ello en repetidas ocasiones durante los meses de junio y julio del 2018. Los abusos se produjeron en el coche, en distintos descampados y alguna vez en la vivienda familiar.

De lo que han quedado absueltos tanto el padre como la madre de la víctima es del delito de detención ilegal del que les acusó la Fiscalía por entender que la hija lo había sufrido cuando en agosto del 2018 toda la familia viajó a Rumanía y residieron durante unas semanas en casa de un familiar, vivienda de la que los progenitores de la chica le prohibieron que saliera sola sin su permiso.

Además de las penas de cárcel, la Audiencia Provincial también ha dispuesto que por el delito continuado de abuso sexual con penetración con la agravante de parentesco el acusado no pueda comunicarse ni acercarse a menos de 300 metros durante trece años y a cinco de libertad vigilada.

Por los otros dos delitos, tanto el padre como la madre de la víctima también tendrán prohibido comunicarse y acercarse a menos de 300 metros de su hija durante cuatro años.

El 25 de abril del 2019 ya se impuso a los dos condenados la prohibición cautelar de acercarse a su hija y el 22 de mayo del 2021 se decretó prisión provisional para ambos, medida que persistió hasta el 13 de enero del 2022. En ese mismo auto, el juzgado también impuso a ambos la suspensión temporal del ejercicio de la patria potestad de los dos hijos menores de edad que tienen.