Los alcaldes vinculan su beneplácito a que el proyecto respete el medio ambiente
19 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.El proyecto para recuperar la actividad minera en los terrenos de la vieja explotación de Riotinto, ubicados en Touro y en O Pino, cuenta con el beneplácito de los alcaldes de ambos municipios, aunque ese respaldo está condicionado al cumplimiento de las medidas que, según los regidores, contempla la iniciativa empresarial para subsanar la contaminación que causó en el entorno el abandono de la mina en la década de los 80. Tanto el primer edil de Touro, Ignacio Codesido (PP), como su homólogo de O Pino y compañero de partido, Manuel Taboada, apoyan la actuación por el revulsivo económico que tendrá en la zona.
«Pode supoñer un empuxe importante», afirma Codesido, que, con todo, anuncia que desde la administración local aprovecharán el plazo en curso de presentación de alegaciones para exigir formalmente a la promotora de la mina de cobre, una sociedad en la que participa la empresa Explotaciones Gallegas S.L., que regenere los terrenos afectados por la anterior actividad. Apunta al respecto el alcalde de Touro que «a misión dos concellos será velar pola eliminación da contaminación que aínda estamos sufrindo da anterior mina, sobre todo, e o que é máis importante, nas augas dos ríos Portapego e Pucheiras». El Concello de Touro también ha puesto a disposición de los vecinos un modelo de alegación para que presenten las objeciones que consideren oportunas a la nueva explotación minera, que afectará especialmente a los vecinos de Arinteiro. Con los lugareños de ese núcleo de la parroquia de Loxo, propietarios de terrenos de uso agrícola y forestal que se verán afectados por la mina, mantuvieron un encuentro representantes de la promotora, que también explicarán el proyecto a los vecinos de O Pino.