«Pequeños fuegos por todas partes»: Mujeres con conciencia de clase y prejuicios de raza

b. p. l. REDACCIÓN / LA VOZ

PLATA O PLOMO

Erin Simkin

La adaptación de la novela superventas de Celeste Ng, que Reese Witherspoon y Kerry Washington producen y protagonizan, llega este viernes a Amazon Prime

22 may 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Mientras Big Little Lies deshoja la margarita sobre si llegará a tener o no una tercera temporada, la adaptación a la pantalla de la novela superventas de Celeste Ng Pequeños fuegos por todas partes puede servir de evocación de esas historias de madres coraje de familias acomodadas y casas maravillosas que están consumidas por el afán de perfección y los demonios del pasado.

Reese Witherspoon deja a la Madeleine McKenzie de Monterrey para meterse ahora en la piel de Elena Richardson, una madre de los años noventa volcada en sus cuatro hijos, esposa de un abogado y que vive en una coqueta urbanización de Ohio. Es también dueña de una propiedad inmobiliaria que cede en alquiler, y que constituye la vía por la cual conoce a Mía (Kerry Washington), una artista de vida errante y misteriosa que se muda con su hija adolescente. El peso de la acción recae en la relación entre ambas mujeres y madres, con sus distintas concepciones sobre la identidad, la crianza de los hijos, la conciencia de clase y también el racismo que subyace en quien cree no ser racista. Secretos y pasados ocultos son los que mueven la historia hacia adelante.

Otra de las similitudes que guarda la serie de Hulu -que hoy llega a Amazon Prime- con Big Little Lies es la implicación de sus dos protagonistas, Witherspoon y Washington, como productoras de una serie que encaja en el espacio que han jugado las plataformas como altavoz para las nuevas historias protagonizadas por mujeres de mediana edad.