La suerte devolvió a la comunidad gallega más de 15 millones, pero el gasto había superado este año los 158
23 dic 2008 . Actualizado a las 21:51 h.Galicia se ha tenido que conformar este año con las migajas de la lotería de Navidad, aunque sea Ourense una de las provincias agraciadas con el gordo. Por primera vez tocó allí el primer premio, pero los tres millones que dejó en Allariz quedaron ensombrecidos porque en la capital ourensana se lograron más de cuatro millones solo en aproximaciones.
En total se estima que en pequeños premios Galicia recibió más de quince millones que fueron a parar a localidades como Caldas, Cedeira, Cee, Ferrol, Foz, Lalín, Lugo, Noia, Ordes, Paiosaco y Silleda, los clientes de las droguerías Arenal y a las pedreas y terminaciones de las grandes administraciones urbanas. Poca ganancia, ya que este año los gallegos nos hemos dejado más de 158 millones en buscar ayer la suerte. Quizás los escasos premios recibidos este año se corresponden con la cautela con la que los gallegos compraron. Si los españoles se gastaron de media unos 72,59 euros, en la comunidad la cantidad se reducía a los 57,01, lo que suponía un 1,06% menos que en el 2007.
La impaciencia acompañó este año a los jugadores. El gordo fue cantado tarde, a menos de un minuto para el mediodía, por dos niños del colegio San Ildefonso, la madrileña Vanesa Tapia y el hijo de emigrantes dominicanos Brandon Cabrera. El de Allariz, distribuido por la administración número 1, había sido vendido con mucha antelación, en los meses de verano, y se teme que no haya quedado en el pueblo, sino que las ganancias estén repartidas entre los turistas. Sin embargo, el propietario del despacho, Perfecto Fernández, aseguró que se sentía «como Dios» por haber vendido la serie premiada, aunque en general el ambiente en la administración era menos alegre de lo esperado a falta de los vecinos premiados.
El gordo también llegó en forma de regalo a un propietario de un restaurante de Piñor de Cea, en O Carballiño, que fue obsequiado por un amigo del País Vasco que le dio un décimo a él y otro a su hija. Además de Ourense, el 32365 se vendió en otras siete ciudades: Alicante, Barcelona, Soria, Guipúzcoa, Jaén, Madrid y Zaragoza.
Dentro de los grandes premios, Vigo es otro de los escasos puntos con suerte en Galicia. Allí, la administración número 29, situada en el centro de Alcampo de Coia, repartió 50.000 euros de un quinto premio, el del número 30227. La propietaria, Eva Vía, comentaba desilusionada que se había vendido «muy poquito» y en ventanilla y que fueron «números sueltos».
Barcelona y Soria
La lotería nacional fue especialmente prolífica con las provincias de Barcelona y Soria, por lo que han saltado los chistes fáciles de la financiación autonómica, en el caso catalán, y el de la repoblación y el reconocimiento por ser la segunda provincia española que más dinero ha jugado por habitante, en el caso de Soria.
El segundo premio, dotado con un millón de euros por serie, correspondió al número 78400 y fue vendido íntegramente en la administración número 64 del centro comercial Carrefour situado en el distrito madrileño de Villaverde. Entre los agraciados están los trabajadores de la empresa editorial Wolters Kluwer, con sedes en Madrid, Barcelona y Valencia.
Soria, que también se vio tocada por el gordo, disfruta, casi en exclusiva, de los rendimientos del tercer premio, un madrugador 80076, dotado con más de 97 millones de euros, y que fue vendido íntegramente en la oficina de El Collado y en el restaurante Gary. Entre las anécdotas de la jornada está la del dueño de este bar, donde se vendió prácticamente todo el tercer premio, quien se encontró con que llevaba además uno de los diez décimos que se vendieron en Soria del gordo, por lo que él y sus familiares fueron agraciados, en total, con más de 750.000 euros.
Solo dos administraciones, la 136 de Madrid y la 59 de Bilbao, repartieron en su totalidad los dos cuartos premios del sorteo, que recayeron en los números 49730 y 79294 y repartieron los 200.000 euros con que está dotada cada serie.
Los quintos no hacen millonarios, pero han salpicado de millones toda la geografía española, y salvo dos (uno en Los Llanos de Aridane en Tenerife y otro en Hospitalet de Llobregat), estos números se vendieron en numerosas administraciones de un sinfín de provincias.
Los ocho quintos premios, de 50.000 euros por serie cada uno, correspondieron a los números 70593, 36199, 73450, 29127, 30227, 58616, 81792 y 56430.