Polémica en Portugal por el estreno de «Supernanny», al que acusan de violar los derechos de los niños

C.L. / AGENCIAS

SOCIEDAD

sic

La Comisión Nacional de Promoción de los Derechos y Protección de los Niños y Jóvenes ha exigido la retirada de las imágenes del primer programa mientras la Fiscalía investiga el caso

26 ene 2018 . Actualizado a las 18:49 h.

El estreno el pasado domingo del programa Supernanny en Portugal ha levantado tal polémica en las redes sociales que la cadena que emite el formato se ha visto obligada a responder a un torrente de críticas procedentes de organizaciones de defensa de la infancia y psicólogos. 

El primer capítulo, emitido hace cinco días, presentó a Margarida, una niña de siete años residente en la localidad de Loures, a unos veinte kilómetros al norte de Lisboa. El lunes siguiente a su exhibición la Comisión Nacional de Promoción de los Derechos y Protección de los Niños y Jóvenes (Cnpdpcj) de Portugal divulgó un comunicado en el que cree que existe un elevado riesgo de violación de derechos de los niños.

Según precisa la comisión, se trata «del derecho a su imagen, a la reserva de su vida privada y de su intimidad», apunta, antes de subrayar que el contenido del formato es «manifiestamente contrario al interés superior del menor, pudiendo producir efectos nefastos en su personalidad, inmediatos y a plazo».

La presidenta del Cnpdpcj, Rosário Farmhouse ha dicho en declaraciones a medios digitales portugueses que la niña ya tenía problemas en la escuela solo con las promociones del programa. Por eso, ante la publicación del comunicado y de la cantidad de quejas recibidas, el caso se ha remitido al departamento responsable de Loures, quien a su vez emitió una carta a la cadena del programa, SIC, pidiendo que retirara en 48 horas todas las imágenes de la niña protagonista del capítulo de estreno.

SIC respondió entonces que el formato del programa creado en Reino Unido en 2004 ha demostrado ser inocuo en otros países en los que se ha producido, incluido España, donde «los patrones de protección de los derechos de los menores no se revelan menos exigentes» de los de Portugal.

«La experiencia acumulada en esos países ha demostrado que Supernanny no genera efectos negativos o de censura en el ambiente escolar y social y que por el contrario contribuye a una mejoría significativa de la vida familiar», agrega la cadena, que asegura haber cumplido con la legislación vigente y haber obtenido las autorizaciones necesarias. 

Mientras las quejas continúan, el Ministerio Público ha informado de que la Fiscalía sigue vigilando el caso y analizando cuáles son las posibilidades legales de intervención. 

En respuesta a las últimas críticas sobre Supernanny, SIC dijo este viernes que el programa «no substituye diagnóstico alguno o asesoramiento psicológico», y que tiene «una vertiente pedagógica, fundamental para un debate necesario -y que queremos que sea extendido a la sociedad portuguesa- sobre cuestiones como la educación familiar y la paternidad».

El segundo capítulo tiene prevista su emisión el próximo domingo, cuando se conocerá el caso de Francisco, o lo que sucede «cuando la familia es rehén de un pequeño dictador», según la promoción de la cadena.

Supernanny se ha emitido en otros países como Estados Unidos, Alemania, Francia, España, Australia o Brasil, entre otros.