Un simulador comprueba el resultado de una operación de la vista antes de pasar por el quirófano

R. R. LA VOZ

SOCIEDAD

CSIC

El dispositivo portátil desarrollado por el CSIC, que está a punto de ser lanzado al mercado, consiste en un casco visual binocular ligero

07 feb 2019 . Actualizado a las 16:43 h.

La cirugía de cataratas es una de las operaciones más comunes, en especial entre las personas mayores. La sustitución del cristalino por una lente intraocular es hoy en día un proceso rápido e indoloro, pero al paciente le pueden asaltar las dudas y la incertidumbre. ¿Cómo quedaré?, ¿veré bien? Estas preguntas tendrán a partir de ahora una respuesta antes de la intervención gracias a un simulador portátil que ha patentado el CSIC y cuyos resultados se han presentado en la revista científica Scientific Reports. La nueva tecnología, que está a punto de salir al mercado, consiste en un casco visual binocular ligero.

De este modo, el paciente que esté a punto de ser operado de cataratas podrá experimentar cómo va a mejorar su visión una vez que pase por el quirófano. Lo harán gracias a un simulador portátil que ofrece los efectos de una lente multifocal intraocular, que permite ver a diferentes distancias, de forma realista antes de ser implantada. Estas lentes multifocales se emplean en operaciones de cataratas o para la corrección de la presbicia o vista cansada. Para ello existen en el mercado distintos diseños y elegir entre uno u otro depende de la tolerancia y preferencias de cada paciente.

«La posibilidad de que el paciente experimente la visión con una lente multifocal antes de la cirugía resulta muy atractiva para aliviar la incertidumbre y poder manejar sus expectativas», explica la investigadora Susana Marcos, que trabaja en el Instituto de Óptica del CSIC. Su equipo en el Laboratorio de Óptica Visual y Biofotónica lleva años desarrollando tecnologías de simulación de visión simultánea con el fin de evaluar la calidad visual con nuevos diseños de lentes multifocales antes de que estas sean implantadas o, incluso, fabricadas. 

El nuevo simulador puede ser controlado a través de una aplicación para el móvil o la tablet. Con este programa es posible no solo controlar las lentes del dispositivo, sino también llevar un registro de las pruebas llevadas a cabo en cada paciente allá donde esté.