Pacientes con ictus coruñeses serán pioneros en el 2021 en probar un fármaco protector del cerebro para evitar secuelas

JOEL GÓMEZ SANTIAGO / LA VOZ

SOCIEDAD

IDIS

Investigadores de Santiago e Israel ultiman el producto, que se ha usado ya con éxito en fases de experimentación

12 dic 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Pacientes del complejo hospitalario público de A Coruña, y de los centros La Paz y La Princesa de Madrid, serán pioneros en beneficiarse en el 2021 de un nuevo fármaco, que ultiman el Instituto de Investigación Sanitario de Santiago (IDIS) y el Instituto Weizmann de Ciencias de Israel. El proyecto tendrá un impuso, que se prevé sea el definitivo antes de beneficiar a pacientes, con una financiación de un millón de euros del Instituto de Salud Carlos III [un organismo del Gobierno de España, de referencia en salud pública y en investigación biomédica] y la Unión Europea a través de fondos Feder.

«Lo que hace este fármaco básicamente es bloquear el efecto del glutamato, que es una molécula que se libera en el cerebro y que se necesita para el funcionamiento correcto de las neuronas. Cuando hay una isquemia se libera en cantidades muy por encima de las normales y mata las neuronas, con efectos muy graves para la salud. Esta encima metaboliza el glutamato, reduce sus niveles y protege el tejido neuronal, para que no se dañe tanto. Es un fármaco protector que podría darse incluso con otros fármacos disponibles, como los trombolíticos», explica Francisco Campos, del Laboratorio de Investigación de Neurociencias Clínicas del IDIS, que lidera este proyecto.

 

«La idea es que se pruebe ese nuevo fármaco en pacientes que padezcan un ictus antes de que lleguen al hospital, para que se beneficien más de sus efectos y evitar así las secuelas y las consecuencias de la enfermedad. Podría administrárseles en la ambulancia o ambulatoriamente. Se trataría así de reducir los tiempos de intervención, que son críticos en quienes sufren un ataque cerebral. Tenemos evidencia de que no es muy tóxico y que favorecería una estrategia enfocada a evitar que las neuronas que están dañadas tras un ictus se mueran», sostiene este experto.

El IDIS trabaja hace cinco años en el la investigación y desarrollo de este nuevo fármaco y ha demostrado su eficacia en fases experimentales. En los próximos cuatro años, y con esta financiación europea, dedicarán una primera fase a realizar los estudios de seguridad y de efectos adversos para pacientes, una labor a la que dedicarán el primer año o algo más, indica Francisco Campos. Después conseguirán las autorizaciones necesarias para probarlo en pacientes, agrega: «Al cabo de los cuatro años esperemos tener evidencias de su funcionamiento y transferir el producto para que lo desarrolle una biofarmacéutica grande», manifiesta.

Efecto tóxico limitado

De momento, el fármaco se ha producido para utilizarlo en el laboratorio, con animales, con buenos resultados. La gran ventaja de este compuesto es que se trata de una proteína humana presente en la sangre, una transaminasa, y por tanto con un limitado efecto tóxico, resalta.

El IDIS destaca que la garantía de los estudios previos realizados por el Laboratorio de Investigación de Neurociencias Clínicas de Santiago, y su experiencia en el campo de investigación sobre el ictus cerebral, fueron dos piezas claves para conseguir esta financiación europea.

Este laboratorio está ubicado en el Hospital Clínico de Santiago. Es multidisciplinar y lo integran una veintena de investigadores, especialistas en Medicina, Física, Farmacia, Biología y Química.