Feijoo augura una «loita titánica» durante las próximas semanas

Tamara Montero / Uxía Rodríguez REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

La situación epidemiológica se mantiene por debajo del pico de la segunda ola, pero la progresión es tan acelerada que de no hacer nada, a mediados de febrero se llegaría al colapso sanitario

13 ene 2021 . Actualizado a las 23:11 h.

Semanas duras y una «loita titánica». Es lo que le espera a Galicia durante las próximas semanas para contener el avance de la tercera ola, mucho más intensa que la segunda a la vista de los datos que se han ido sucediendo estos días y que este miércoles han marcado un nuevo récord de contagios diarios desde el inicio de la pandemia, con más de mil.

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, ha presentado la batería de restricciones que regirán al menos hasta finales de mes para contener una progresión de la transmisión que es mucho más acelerada que en la segunda ola y para evitar el colapso sanitario a toda costa.

La incidencia acumulada se ha doblado en apenas un mes. Galicia se encuentra hoy en los 321 casos por cien mil habitantes en los últimos 14 días, todavía por debajo de la media de España, por encima de 450, y más preocupante es la comparación con la incidencia a siete días, que está ya en 207 casos por cien mil habitantes cuando hace 30 días era de unos 80 por cien mil. La diferencia cada vez más pequeña entre ambas tasas (a 7 y a 14 días) demuestra una tendencia creciente muy pronunciada en la incidencia del covid-19 en Galicia.

El pico de contagios produce un incremento de la atención en urgencias y de las hospitalizaciones alrededor de una semana después y a los diez o doce días empieza a tener impacto en las ucis. En este momento, la ocupación de críticos es un 22 % inferior al pico de la seguda ola y en las camas de planta todavía está un 10 % por debajo, pero a la vista de la progresión de los contagios, y de no hacer nada para frenarlo, se llegaría a finales de febrero a los niveles del pico de la primera ola, cuando llegó a haber 178 personas ingresadas en las ucis y más de 900 en las plantas hospitalarias.

Los modelos que han estudiado el comité clínico y Saúde Pública dejan ver que implantando medidas duras, como las que se han anunciado este miércoles, el pico de la ola se adelantaría a finales de este mes o inicios de febrero y además las curvas comenzarían a bajar antes de alcanzar la presión asistencial de abril. Si hay que elegir entre bares cerrados y ucis colapsadas, «hai que intentar que non se colapsen as ucis», ha explicado el presidente.

Por el momento, y salvo casos excepcionales en algún hospital (principalmente los que están ampliando sus ucis y en obras) los bloques quirúrgicos siguen funcionando con actividad programada. Es decir, no se ha llegado al límite de ocupación que obliga a empezar a suspender la actividad ordinaria para centrarse en la atención al coronavirus. Sin embargo, Feijoo ha recordado que hay que reservar siempre un porcentaje de camas de críticos para el covid-19 y que ese porcentaje no se puede ocupar con actividad programada.

Vienen semanas duras y «non temos que deixarnos enganar pola foto fixa actual». Las autoridades han esperado a ver el alcance real y completo de las celebraciones navideñas para poder actuar en consecuencia y con todos los datos sobre la mesa e intentar mitigar al máximo los efectos perniciosos también en la economía. «Non ignoramos que as restricións supoñen efectos durísimos para determinados sectores económicos, para empregos e para centos de familias» que se enfrentan de nuevo a la incertidumbre tras las fechas navideñas, en las que se produjo una actividad «de risco» que ha derivado en una tercera ola con un «percorrido intenso». 

«Non estarán sos», se ha comprometido el presidente, que ha recordado que se han comenzado a pagar con rapidez las ayudas a la hostelería, el sector más castigado con diferencia por la pandemia, y que además a lo largo de esta jornada se están produciendo reuniones para diseñar un paquete de medidas que palíe una situación «inxusta» porque «non se producen máis contaxios nos bares que nas reunións familiares». Más de 14.700 negocios de hostelería han recibido ya ayudas directas, a las que se han dedicado 21 millones de euros por el momento. Además, los negocios que se han visto obligados a cerrar pueden tener otras ayudas. El 50 % han obtenido ayudas para autónomos o dirigidas a microempresas. 

«É duro pedirlle a alguén que peche o seu modo de vida, pero é inevitable», ha lamentado Feijoo. Los únicos dos sitios en los que no se puede entrar a no ser que haya una autorización judicial son las casas y la hostelería, que son además los dos lugares en los que se quitan las mascarillas, el principal factor de riesgo para el contagio. Por eso, Feijoo ha insistido varias veces en que no haya reuniones de no convivientes en los domicilios porque entonces no se cortarán las cadenas de contagio y la situación seguirá deteriorándose.

Galicia alcanza cifras nunca vistas en la pandemia y suma más de mil nuevos contagios en un solo día

Los casos activos ascienden a 9.479 | Hay más de medio millar de hospitalizados

UXÍA RODRÍGUEZ

La tercera ola ha llegado con una fuerza arrolladora. Galicia ha sumado 1.047 nuevos contagios en un solo día, 928 detectados a través de una PCR. Los últimos datos del Sergas hacen referencia al período comprendido entre las 18.00 horas del 11 de enero y las 18.00 del día 12: 24 horas en las que se ha alcanzado una cifra nunca vista en toda la pandemia tras realizar más de 10.000 PCR (cuatro mil más que el día anterior). La comunidad va de récord en récord desde el final de las fiestas navideñas, el sábado 9 de enero se alcanzaron los 914 positivos diarios y este martes fueron 844. La tasa de positividad se sitúa en el 11 %, más del doble del límite fijado por la OMS para dar por controlada la pandemia y por encima del 10 % que marca la frontera para pasar a una situación de alto riesgo.

El número de casos activos también refleja esta escalada sin precedentes. Hay 9.479 enfermos de covid-19 en la comunidad, son 669 más que en el balance anterior, lo que sitúa este incremento como el mayor desde el inicio de la crisis sanitaria. Ayer se habían sumado ya 560 casos activos. Durante el pico de la segunda ola el máximo incremento de infecciones en un día fue de 461. A este ritmo es muy probable que mañana se sobrepase ya la barrera de los 10.000 afectados llegando entonces al máximo que se alcanzó a principios de noviembre. 

Todas las áreas sanitarias han visto emperorar sus datos en las últimas horas. Las de A Coruña y Santiago siguen aglutinando el 43 % del total de infectados que hay en la comunidad. En la primera se han sumado casi doscientos casos activos en el último balance por lo que ya son 2.260 las personas que están pasando la enfermedad. Santiago cuenta con 1.886 infecciones activas (76 más) y Vigo sufre una intensa subida con 141 casos más hasta llegar a los 1.720. Les siguen Ourense con 1.232 pacientes (92 más), Lugo con 890 (80 más), Pontevedra con 832 (23 más) y Ferrol con 659 (61 más).

La presión hospitalaria, uno de los factores que más preocupa, también sigue la línea ascendente que comenzó hace días. En las últimas 24 horas ingresaron en los hospitales gallegos otros veinte enfermos de covid-19 con lo que ya se supera el medio millar. En total son 511 pacientes, 438 están en planta y 73 en la uci (tres más que el martes). Aún así la tasa de hospitalización se mantiene en el 5,4 % y los números están lejos de llegar a los más de mil ingresados que hubo en el peor momento de la primera ola a principios del mes de abril.

A última hora de este martes Sanidade notificó otros doce fallecimientos, la mitad de ellos usuarios de residencias de mayores, por lo que las víctimas mortales desde el inicio de la pandemia ascienden a 1.474.

Estas cifras se han conocido tan solo un par de horas antes de que Alberto Núñez Feijoo comparezca sobre las 11.30 de la mañana para anunciar las nuevas restricciones que se pondrán en marcha en Galicia para tratar de frenar esta tercera ola.  

El comité clínico, reunido este martes hasta última hora de la noche, ha propuesto endurecer las medidas para cortar la cadena de contagio y por eso, opta por que toda la comunidad quede comprendida en los dos niveles más altos de restricciones, lo que implica entre otras cosas que toda la hostelería gallega cierre a las 18 horas y que las reuniones de no convivientes queden limitadas a cuatro personas en todos los concellos.