Las borrascas gallegas emigran a Islandia

SOCIEDAD

Vista de un paisaje de Islandia
Vista de un paisaje de Islandia Olivier

Galicia sigue con una configuración atmosférica inédita para la época del año

26 ene 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Islandia puede parecer un lugar inhóspito en invierno. Y así es. Básicamente por el intenso frío y la ausencia total de luz, pero no por la lluvia. La media anual en la capital Reykjavik asciende a unos 1.300 litros por metro cuadrado, mientras que en Santiago es de 1.700. Sin embargo, en las últimas semanas el agua que escasea en Galicia se está concentrando en la isla nórdica. Esto se debe a que la autopista de las borrascas se ha trasladado al extremo norte.

Los ciclones extratropicales que afectan a Galicia nacen en Terranova. Se forman en la confluencia entre el aire frío polar y el cálido subtropical. En invierno esa zona se sitúa cerca de la isla canadiense. La presencia del océano facilita que interactúen esas masas de aire ya que en el continente resulta más difícil encontrar masas cálidas en esta época del año. Una vez formada la borrasca cruza el Atlántico empujada por la circulación general de la atmósfera en estas latitudes, que se mueve de oeste a este. Lo normal es que las bajas presiones se sitúen al oeste de Irlanda cuando afectan a la comunidad gallega con sus frentes. El problema es que hace tiempo que nada es normal.

El anticiclón de las Azores sigue abarcando un área muy extensa que no solo protege a Galicia, sino prácticamente a todo el oeste de Europa, donde la noticia también es la falta de lluvia que ya empieza a preocupar en algunos países.

Las borrascas que deberían estar regando con generosidad en esta época del año a países como Inglaterra, Francia, Países Bajos, Bélgica, Alemania y por supuesto en Galicia se están desviando muy hacia el norte ya que son incapaces de superar la barrera anticiclónica y acaban descargando en Islandia.

La otra cara de esta situación invertida se encuentra en países como Turquía y Grecia. Las borrascas que llegan a Islandia bordean el anticiclón y se mueve hacia el sureste del continente. La irrupción del aire húmedo y frío de origen polar ha generado un intenso temporal de nieve bautizado como Elpis que ha paralizado ambos países.

En definitiva la lluvia ha emigrado al extremo norte del hemisferio boreal y la nieve al este de Europa. Mientras en la zona occidental persiste un tiempo extremadamente seco y con temperaturas negativas. La pasada madrugada volvió a ser muy gélida en la comunidad, con registros negativos de hasta 7,7 grados bajo cero. Y la previsión sigue anunciando más jornadas soleadas y con temperaturas máximas suaves.