Este miércoles será una nueva jornada de alertas por tormentas intensas en las cuatro provincias
31 may 2023 . Actualizado a las 05:00 h.No es que sea la primera vez que ocurre, pero la situación meteorológica actual no suele producirse muy a menudo. Las tormentas en Galicia empezaron el pasado sábado y la previsión señala que caerán todos los días al menos hasta el domingo. Salvando las distancias, la configuración atmosférica ahora mismo resulta más propia de un clima tropical.
Entre la latitud 0 y los 30 grados de ambos hemisferios, la energía solar calienta con fuerza la superficie. Sin influencia de las regiones polares, la temperatura varía muy poco a lo largo del año. Además, en las zonas tropicales solo hay dos estaciones: una seca y otra húmeda. Y en la época más lluviosa los días se repiten. Comienzan con el cielo despejado y el aire va caldeando el ambiente poco a poco. Después, producto del calor acumulado en superficie y la evaporación, empiezan a desarrollarse sistemas tormentosos que acaban descargando grandes cantidades de agua.
«La similitud con los trópicos viene, sobre todo, por lo prolongado del episodio. En las zonas tropicales y subtropicales los sistemas tormentosos son repetitivos porque el calentamiento en superficie es elevado y cualquier zona de aire frío en altura hace que se formen. Sin embargo, en latitudes medias la atmósfera es más dinámica y las situaciones propicias para las tormentas suelen durar menos. Siempre hay alguna baja presión o anticiclón que cambia el mapa cada pocos días y hace que las condiciones propicias para las tormentas se desplacen a otros lugares o desaparezcan», reconoce Juan Taboada, de MeteoGalicia.
Otro parecido razonable entre el tiempo que tenemos esta semana y el que suele dominar en las latitudes tropicales es que las tormentas en Galicia descargan únicamente por la tarde. «A medida que el sol va subiendo en el horizonte va calentando la superficie y esta calienta el aire que tiene en contacto. Este aire superficial gana temperatura, pierde peso y comienza a ascender. Al encontrar la zona de aire frío de capas medias y altas, desciende su temperatura y termina condensando la humedad, formándose cúmulos y cumulonimbos que dan lugar a las tormentas. Para que se inicie este proceso se necesita una temperatura adecuada en superficie que se suele dar por la tarde», destaca Taboada.
Otra circunstancia más habitual del trópico que de una región de latitudes templadas como Galicia es la enorme cantidad de lluvia que se está recogiendo en poco tiempo. Las trombas de agua descargaron ayer hasta 34 litros en pocos minutos en la localidad coruñesa de Monfero. Unos registros que ya se dieron en Santiago el domingo y el lunes en Ourense.
Sin olvidar que al igual que sucede en los trópicos, la actividad eléctrica está siendo muy importante. Ayer mismo se registraron más de 2200 rayos.
Esta situación de inestabilidad persistente se produce como resultado de la suma de varios factores. Uno de ellos es la «pelota» de aire frío procedente del norte de Europa que cruzó la comunidad el fin de semana. «Al llegar al Atlántico se encontró con los restos de la dana que la semana pasada dejó tormentas muy importantes en el sur y este de la Península. La fusión de esas dos zonas de aire frío en capas medias y altas de la atmósfera, combinado con el anticiclón en superficie situado sobre el Reino Unido, explican la situación meteorológica actual», concluye el meteorólogo.
Este miércoles hay nuevos avisos activos por intensas tormentas en el interior de Pontevedra, en toda la provincia de Ourense y en la montaña de Lugo. Mañana se concentrarán únicamente en la provincia ourensana, la zona más afectada de la comunidad.