Las complejas relaciones entre padres e hijos famosos: de Pierce Brosnan a Brooklyn Beckham

Joaquina Dueñas MADRID / COLPISA

SOCIEDAD

El actor Pierce Brosnan, a la izquierda, y su hijo Christopher, en la fotografía derecha
El actor Pierce Brosnan, a la izquierda, y su hijo Christopher, en la fotografía derecha CORDON PRESS

El actor que interpretó a James Bond en el cine acaba de reconciliarse con su hijo Christopher, del que llevaba distanciado 20 años

29 nov 2025 . Actualizado a las 13:11 h.

Este noviembre del 2025 quedará marcado en rojo en el diario personal de actor Pierce Brosnan después de que a principios de mes se reencontrara con su hijo Christopher, del que llevaba distanciado 20 años. El diario Daily Mirror publicó las fotografías de ambos saliendo de un restaurante de Notting Hill, en Londres, acompañados por otro de los hijos del actor.

En 1980, el intérprete del agente secreto 007 se casó con la actriz australiana Cassandra Harris, que ya tenía dos hijos de su matrimonio con el productor Dermot Harris, Charlotte y Christopher, a los que Brosnan adoptó. A ellos se sumó su único hijo biológico en común, Sean. En 1991, Cassandra falleció prematuramente por un cáncer de ovarios, la misma enfermedad que acabó con la vida de Charlotte en el 2013. Dos golpes que pusieron a prueba la unión entre Brosnan y Christopher, que sucumbió al consumo de drogas.

Con una vida marcada por la dependencia a los estupefacientes, ha entrado y salido de centros de rehabilitación. «Nos ha puesto a prueba a todos como familia, pero a nadie más que a sí mismo. Solo él sabe cómo salir de esta. Pero no quiere. Y me duele, porque eso hace que te cierres», reconoció su padre en una entrevista para Playboy en 2005.

La cena familiar de hace unas semanas ha sido un punto de inflexión para la familia y para Christopher, que ahora tiene 52 años y parece haber reconducido su vida. Testigos del encuentro aseguraron que el ambiente era animado y relajado.

Otro vínculos maltrechos

Pero Brosnan no es el único padre famoso con problemas paternofiliales. Adicciones, enfrentamientos o abandonos forman parte del día a día de algunos de los protagonistas de la crónica social. Anthony Hopkins lleva 20 años sin hablarse con su hija Abigail, aunque, a diferencia del primero, el intérprete de Hannibal Lecter nunca tuvo una relación fluida con su descendiente. «Supongo que soy un egoísta, no he sido un buen marido ni un buen padre», reconoció en una entrevista en The New York Post. Hopkins abandonó a su familia en 1968, cuando Abigail tenía solo 14 meses. Desde entonces, el contacto fue muy escaso: «Lo veía, pero quizá una vez al año», relató la mujer en The Telegraph en el 2006. La relación estuvo marcada por numerosas idas y venidas y, aunque en los años 90 estuvieron más unidos, volvieron a separarse tras una pelea. Desde hace dos décadas, la ruptura es definitiva. «Mi esposa Stella le mandó una invitación para que viniera a vernos y ni una palabra de respuesta», contó el pasado octubre Hopkins a la revista Times. «Le deseo lo mejor, pero no voy a desperdiciar mi vida en esto. Si quieres desperdiciar tu vida guardando rencor, adelante», zanjó.

Angelina Jolie estuvo mucho tiempo distanciada de su padre, Jon Voight, debido a los términos en los que se divorció de su madre, Marcheline Bertrand, que falleció en el 2007 por cáncer de mama y de ovario. Ahora son los hijos de la intérprete de Maléfica quienes han renegado de su padre, el también actor Brad Pitt, llegando incluso a quitarse el apellido legalmente varios de ellos.

Jennifer Aniston y su madre, Nancy Dow, también estuvieron alejadas durante años, hasta poco antes de su muerte en el 2016. «Ella era modelo y todo se trataba de cómo se veía y cómo era yo», contó la protagonista de Friends. «No salí la niña modelo que ella esperaba y fue algo que realmente me impactó», añadió en una entrevista con The Sunday Telegraph. «Esta niña pequeña solo quería ser amada por una madre que estaba demasiado ocupada con cosas que no importaban del todo», se lamentó. Todo empeoró cuando Aniston se convirtió en una estrella. Su madre acudió a programas de televisión para airear su vida privada y en 1999 publicó un libro sobre su relación: From Mother and Daughter to Friends: A Memoir. Las dos estuvieron 15 años sin hablarse.

«Te perdono por no haber estado siempre que te he necesitado y por no ser el padre que esperaba». Así de duras fueron las palabras de Lily Collins hacia su padre, Phil Collins. «Te perdono los errores que has cometido. Y aunque parezca que es muy tarde, no lo es. Aún hay mucho tiempo para seguir adelante», le dedicó en su libro Unfiltered: No Shame, No Regrets, Just Me (Sin filtros: Sin vergüenza, sin arrepentimientos, solo yo). Cuando el artista rompió su matrimonio con Jill Tavelman a través de un fax, la relación padre hija se redujo a los períodos vacacionales. La situación provocó en aquella niña de solo cinco años tristeza e ira, emociones que, con el tiempo, aprendió a gestionar y a aceptar.

El último cisma

Uno de los últimos cismas familiares y también de los más inesperados, es el que protagoniza Brooklyn Beckham que ha decidido alejarse de sus padres, David y Victoria Beckham, y refugiarse en su esposa, Nicola Peltz. Inicialmente, todo parecía estar relacionado con una novia de su hermano Romeo, sin embargo, el paso de los meses y la falta total de relación, llevan a pensar que hay algo más profundo tras este desencuentro.

De hecho, el pasado agosto, Brooklyn y Nicola celebraron una reboda —estaban casados desde abril del 2022— rodeados de los Peltz en la que no hubo ni rastro de los Beckham. Si al principio David y Victoria seguían teniendo en cuenta a su hijo cada vez que hacían una publicación familiar en sus redes sociales, etiquetándolo o subiendo alguna foto suya, desde el desplante estival, el matrimonio cambió su actitud centrándose en los hijos que permanecen a su lado.

En cualquier caso, para todos ellos hay esperanza después de conocer la reconciliación de Pierce Brosnan y su hijo Christopher a pesar de las dos décadas alejados.