Sanidade convoca de manera extraordinaria a más de 33.000 niños de entre 6 meses y 11 años para vacunarse contra la gripe
SOCIEDAD
Será los días 5 y 6 de diciembre en los 14 hospitales públicos. El Ministerio de Sanidad y las comunidades debaten el plan común que recupera la mascarilla
04 dic 2025 . Actualizado a las 09:51 h.Mejorar la cobertura de vacunación antigripal en niños de entre 6 meses y 11 años, que es casi del 47 %. Es el objetivo de una convocatoria extraordinaria anunciada este miércoles por el conselleiro de Sanidade, Antonio Gómez Caamaño, durante una visita al centro de salud de A Parda, en Pontevedra. Se citará a más de 33.000 niños. En los hospitales comarcales se inmunizará este viernes, día 5, por la tarde, en horario de 16.00 a 20.00 horas. Mientras que en el resto de centros de la red del Sergas será el viernes en ese horario y también el sábado, día 6, por la mañana y por la tarde, de 10.00 a 14.00 y de 16.00 a 20.00 horas. En el área sanitaria de Pontevedra y O Salnés serán 2.100 los menores citados. Este proceso extraordinario de vacunación antigripal se produce después del realizado el pasado fin de semana en adultos, en concreto, para la franja de edad de 60 a 69 años. El titular de Sanidade hizo un llamamiento a las familias participen en la vacunación, apuntando que es la mejor protección frente al virus de la gripe.
La campaña arrancó el pasado 29 de septiembre y desde entonces se han vacunado en Galicia 720.000 personas, «das que máis do 67 % son poboación de 65 ou máis anos, que é un dos grupos máis vulnerables. Tamén se vacinou a preto do 60 % do persoal sanitario e a case o 47 % de nenos e nenas ata os 11 anos». Un porcentaje este último que se quiere mejorar con la citación extraordinaria. Gómez Caamaño dijo que desde que comenzó la campaña de gripe se notificaron más de 1.050 ingresos hospitalarios, «a maioría con virus de tipo A».
Sanidad y las comunidades recomiendan la mascarilla para quien tenga síntomas de gripe
La ministra Mónica García se felicita por el acuerdo: «Dijimos que era necesario y posible. Y lo hemos logrado»
j. v. lado
La Comisión de Salud Pública del Sistema Nacional de Salud, que está formada por representantes del Ministerio de Sanidad y de todas las comunidades autónomas, aprobó este miércoles el Documento marco de recomendaciones para el control de las infecciones respiratorias agudas (IRAs), un texto que, según el ministerio, «va a servir para mejorar la respuesta ante la epidemia estacional de virus respiratorios durante la temporada 2025-2026». De hecho, la titular de Sanidad, Mónica García, se felicitó por el acuerdo a través de las redes sociales. «Aprobamos con todas las comunidades autónomas un protocolo común frente a la gripe covid y otras infecciones respiratorias. El teletrabajo o las mascarillas en centros sanitarios salvan vidas. Dijimos que era necesario y posible. Y lo hemos logrado», publicó la ministra en su cuenta de X.
El plan habla mucho de indicadores, vigilancia y evaluación. Se le otorga especial relevancia a los sistemas de vigilancia de las infecciones respiratorias agudas e incide en que «se utilizan diversas fuentes que permiten monitorizar en tiempo real la transmisibilidad, la gravedad y el impacto sanitario». Entre estas fuentes, destacan el sistema de monitorización de la mortalidad diaria (MoMo), el sistema de información de vacunaciones (Sivamin) y los datos de ocupación de los hospitales y de las unidades de cuidados intensivos.
El documento establece cuatro escenarios de riesgo en función de los niveles de transmisibilidad detectados y del resto de indicadores relativos al impacto de estas infecciones en los recursos asistenciales y en la población susceptible. Los distintas situaciones son interepidémica o basal, epidemia de nivel bajo o medio, epidemia de nivel alto y epidemia de nivel muy alto.
Hay una serie de recomendaciones que son generales independientemente del escenario. Ahí entran la promoción de la vacunación, el fortalecimiento de los sistemas de vigilancia, la formación del personal sanitario y no sanitario o la revisión de los planes de contingencia para garantizar la asistencia. También la ventilación de los espacios, la higiene de manos y el uso de mascarilla o la limitación de los contactos por parte de quienes tengan síntomas de estas enfermedades. Luego, cada nivel tiene sus indicaciones específicas.
Situación interepidémica o basal
Operan las recomendaciones generales con especial incidencia en que «se recomienda el uso de mascarilla quirúrgica por personas con síntomas respiratorios, especialmente si van a tener contacto con personas vulnerables, así como su uso continuado por parte de trabajadores sintomáticos en centros sociosanitarios».
Epidemia de nivel bajo o medio
En este escenario se instensifican las labores de coordinación entre las distintas instituciones y las campañas de información a la ciudadanía. Además, «en hospitales, se recomienda el uso de la mascarilla en áreas sensibles (como unidades oncológicas o de trasplantes) tanto por profesionales como por pacientes y acompañantes». En las residencias de mayores «se mantiene el uso continuado por trabajadores con síntomas, y se pueden adoptar medidas adicionales si se detecta transmisión».
Epidemia de nivel alto
Es necesario adaptar los planes de continuidad asistencia para garantizar que hay capacidad de responder a las situaciones que se presentan. En cuanto a la mascarilla, «se recomienda el uso generalizado de mascarilla en espacios comunes de centros sanitarios, como salas de espera o urgencias». En los geriátricos y centros de discapacitados se revisará «la política de visitas, y se aconseja a personas vulnerables utilizar mascarilla en espacios cerrados sin ventilación adecuada».
Epidemia de nivel muy alto
Se activa la coordinación extraordinaria entre territorios mediante las reuniones del Pleno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud. Además «las autoridades sanitarias podrán establecer medidas excepcionales para el control de la transmisión en determinados contextos o colectivos especialmente expuestos».
El Sindicato de Enfermería dice que el plan es «insuficiente» si no se refuerzan las plantillas
El Sindicato de Enfermería (SATSE) ha advertido este miércoles de que cualquier protocolo o plan de actuación frente a los virus respiratorios es «insuficiente, parcial e ineficaz» si no se contempla el refuerzo de plantillas enfermeras y, en general, de profesionales sanitarios con nuevas contrataciones y una reorganización de la atención.
Aunque SATSE ha calificado como «positivo y necesario» que se avance en medidas preventivas y de seguimiento a través del protocolo común por el que aboga el Ministerio de Sanidad y los planes específicos que han introducido algunas comunidades autónomas, ha aseverado que estos no evitarán situaciones de colapso y sobrecarga habituales en estas fechas porque no van a «la raíz del problema», la infradotación de personal.
«Está más que demostrado, año tras año, que, al no haber el personal suficiente que pueda asumir la creciente afluencia de personas en los meses de invierno, los centros sanitarios se colapsan, las esperas en salas no apropiadas, boxes y pasillos se multiplican y la atención empeora», han asegurado desde la organización sindical.
Según han informado, el sindicato ya reclamó el pasado mes de octubre al conjunto de administraciones sanitarias que desarrollasen planes de actuación eficaces, pero ha alertado de que, ya iniciado el mes de diciembre, está constatando que en muchas autonomías ni siquiera los han hecho y en las que sí, estos no contemplan el refuerzo necesario de las plantillas en los hospitales y centros de salud.
A este respecto, ha criticado que Ministerio y comunidades «prefieren acusarse mutuamente» de ser responsables de los problemas del Sistema Nacional de Salud (SNS) o «enzarzarse en polémicas mediáticas», como si son o no convenientes medidas como el uso de mascarillas, antes que dedicar los recursos y medios necesarios para ofrecer la atención que necesita la población.
El sindicato ha destacado que las primeras situaciones de sobrecarga y tensión asistencial se están empezando ya a producir en los hospitales y lo que ahora son situaciones puntuales se convertirán en unos pocos días en algo grave y constante que perjudicará, además de a los pacientes, a los profesionales que se encontrarán «saturados y sobrepasados».